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__tn P.O.V

Me desperté y me revolví entre las sabanas buscando algo que de calor, pero abrí los ojos y me encontré sola, en... No es mi habitación. Me senté y observé alrededor, es la habitación de Rivai, me cubrí con las sabanas mordiendo mi labio. ¿Me trajo aquí luego de lo de anoche? sonreí levemente y me levanté para asomarme, no había nadie, salí agarré mi ropa y me vestí. Caminé  a la cocina para preparar algo ligero, me pregunto donde estará, no me dijo nada de que saldría así que... Hice una leve mueca y dejé un sandwich guardado mientras comía el mío poco a poco. Una vez terminé suspiré mirando el balcón desde la cocina cuando la puerta se abre de golpe.

Observé a Rivai cerrar la puerta tras de sí y luego mirarme de reojo. Abrí mis labios pero los cerré, No sé como llamarle realmente, temo que se moleste si lo llamo por su nombre así que solo bajé mi rostro a mirar mis pies. 

- _tn. -me llamó y lo miré empezando a sonrojarme.

- ¿S-Sí? -caminó hasta pararse a cierta distancia de mi.

- Ven. -ordenó seco, me paré frente a él. - Toma. -me puso una caja de algo en la mano.

- ¿Qué es... -miré la caja detenidamente para darme cuenta muy tarde de lo que era. - ¿P-Pastillas?... -jadeé y él me miraba serio.

- Empieza a tomártelas. -fruncí el ceño levemente.

- No... -cerré mis labios antes de que se escapara algo más, este enarcó una ceja.

- Tómate esa mierda.... -gruñó, yo retrocedí un paso.

- P-Pero... -me agarró de  la mandíbula y me sostuvo con fuerza mirándome a los ojos, gemí por el dolor y sentí como mis piernas flaquearon. 

- ¡Trágate toda esa mierda de una vez! -empezó a gritarme y jadeé sintiendo como las lagrimas empezaban a salir. - ¡No puedo tener un hijo! ¿¡entiendes!? -lo miré y su rostro ya no era serio, sino suplicante, mis rodillas tocaron el suelo al mismo tiempo que las de él. Soltó mi mandíbula y solo miró el suelo. - No puedo. -masculló ya más tranquilo, mordí mi labio secando las pequeñas lagrimas que salieron. - Al menos... No en estas condiciones... - miré mi vientre, dejé completamente de lado las veces que se corrió dentro de mi, estaba tan boba por sus caricias... Alcé mi rostro.

- E-Entiendo. -me miró. - M-Me las tomaré... -me cogió de las mejillas acercándome a su rostro para dejar un sutil beso, suspiró sobre mis labios antes de mirarme a los ojos, luego negó con la cabeza levemente y se separó levantándose y caminando hasta el balcón en donde vi que empezó a fumar, hice una mueca y miré las pastillas, tiene razón... Pero... Mordí mi labio, yo realmente quería casarme y tener una familia... 

Alcé mi rostro mirando su espalda, ¿Aún puedo pensar estás cosas? cerré mis ojos y se me escapó un llanto algo fuerte, bajé mi rostro intentando dejar de llorar, no sé por que lo hacía, simplemente ya no puedo parar. Unos brazos me rodearon apretándome con fuerza, olía a cigarro pero es lo de menos, me aferré a Rivai y enredé mis dedos en su cabello.

- ... perdón... -masculló apenas audible, sonreí atontada dejando de llorar para mirarlo con dificultad.

- N-No importa.... -él miró a otro lado.

- Claro que importa... -nuestras miradas se encontraron.

- No importa... P-Por que al menos sé que te preocupas por mi y... Eso es suficiente para mi... -le sonreí levemente entre el ardor de mis mejillas y la euforia de mi pecho, su mirada se quedó fija durante unos segundos antes de suspirar torpemente y juntar su frente con la mía.

Levi Ackerman x Reader // Dolorosamente //Donde viven las historias. Descúbrelo ahora