Seducción De Venus #PGP2020 #Watty2020

acepto#4

Capítulo 4

Dos días después de aquella noticia, me encontraba dándome un baño. Tomó la pequeña cantina y rocío el agua en mi cuerpo. El agua siempre lograba sanar la tensión que mi cuerpo tenía y me excitaba sentirlo pasear por mi piel. Algo loco ¿no? Me pregunto si mi primera vez sería tan placentero.

Con esos pensamientos al aire termine de ducharme y ponerme mi disfraz llamado uniforme, para luego ir al colegio.

Cuando estoy a punto de salir de la puerta, mis ojos se clavan con mi ex, que vive frente a frente a mi apartamento. Le saco la lengua y el ríe...Seguíamos siendo amigos ¿Por qué lo deje? Pues simple, le faltaba algo que yo necesitaba. Aunque nunca me hizo ningún mal. Sí, tuvimos una relación a la vista, como lo estúpidos clichés, pero algo cliché es igual a algo aburrido. ¿A qué me refiero? Bueno, él era como mí relación prohibida, puesto que mis padres no aceptan que tenga novio. El punto esta que yo no estaba conforme con lo que él me podía ofrecer y punto. (Dejen de ser tan curiosos).

Más temprano les había avisado a mis padres que tenía una actividad importantísima que hacer en la escuela —Tuve que dar millones de razones para que me dejaran llegar más tarde, pero al fin y al cabo lo logre — salí de casa no sin antes darle un golpecito en la cabeza a mi ex. —Siempre nos golpeábamos. Claro, yo le daba más fuerte —Me da un jalón a mi cola de cabello sin lastimarme.

—Ya deja el juego —replico.

—Tú me diste primero

—Siempre te quejas por todo. Niña.

—Mira quién habla.

Y con esa respuesta dividimos caminos.

Ha mediado de la ruta, salude a varios vecinos y compañeros de barrio —No los consideraba mis amigos. Tuvimos el mismo aire de crecimiento en la infancia, pero no las mismas ganas de superación, algo filosófico pero real. — Siento que me paralizó mentalmente cuando visualizó al idiota "Vendedor de sueño". Una largaaaaa historia. No sé si llamarlo novio o ligue. El caso es que ése idiota se acercó a mí fingiendo que quería ser mi novio, pero una semana después él comprendía que tenía que ir a un hotel a follar con él.

No le miró mal ni nada por el estiló, simplemente hago como que no existe y sigo mi camino silbando una música inexistente.

****

Media hora después piso el suelo de mi horroroso infierno llamado secundaría, solo entrar a ese lugar y ya me causa sueño...

Media hora más....

Deslizo mis manos muy lentamente por mi vientre, hasta llegar a mi zona intima. Palpitaba y, ese movimiento me excitaba al mil.

¿Es normal que una chica de 17 años pensara en sexo todo el tiempo? No lo sé, pero me gustaba.

Aun por debajo de mí pantalón de uniforme, podía sentir los latidos de mi coña. Me muerdo el labio inferior, y me imagino todo lo que esos labios —Que ahora expresan algo, que no le estoy poniendo ni la mínima atención, solo a la manera tan candente y sexy que se está moviendo— me pudieran hacer sentir.

«Sí como habla, lo mama». Pienso descaradamente, mientras uno de los chicos de la otra sección de fin de año, habla sobre los procedimientos para hacer el discurso. Me retuerzo en mi asiento, por el cosquilleo que se ha vuelto un tanto incomodo en mi coña. Tratando de hacer frizz con la tela del pantalón y mis labios vaginales.

«Ya quiero que me haga un discurso oral... » pienso morbosa mente.

—¿Venus? — oigo llamarme.