Seducción De Venus #PGP2020 #Watty2020

tú

Capítulo 15

Llegué a casa a eso de las 7pm, el marido de mi prima me pasó a recoger en el velatorio de la madre de Max, cuando lo llamé. Ha decir verdad ya me sentía más que incomoda estando allá sin omitir que los rastros notables de incomodidad comenzaron a fluir más de mí parte, cuando la "Noviecita" de Max apareció a firmarle un espectáculo Drama, que me pareció más fingido que las morisquetas que hago en el espejo del baño cada mañana antes de bañarme. Para evitar mis egoístas pensamientos me centré en encender la computadora de mesa y clavar mi trasero en esa silla y, no moverme hasta terminar la gran parte de la investigación que me correspondía.

Habían pasado 3 días después del suceso del baño y ya enterraron a su madre.

Empecé con la primera pregunta que surgió en mi cabeza, pues no sé dónde deje tirado el manual que nos entregaron con nuestros respectivos temas.

¿Qué es el sexo?

Miles de definiciones respecto a la pregunta aparecen en el buscador, dejando una gran incógnita de cuál sería la más conveniente escoger, las respuestas definidas a la pregunta de qué es el sexo eran...

1...Condición orgánica que distingue a los machos de las hembras.

2...Conjunto de los individuos que comparten esta misma condición orgánica.

3...Órganos sexuales o reproductores, especialmente los externos de una persona.

4...Conjunto de actividades y comportamientos relacionados con el placer sexual.

Las respuestas en el buscador parecen vacías y sin vida, pero hasta ahora mi mente morbosa determina el sexo como el placer sin amor que una persona puede proporcionarle a otra persona.

«Ummm, creo que la 4 es más o menos lo que ando buscando» analizo»

Podría definir el sexo como el conjunto de actividades y comportamientos relacionados con el placer sexual. Es obvio que esa es la repuesta que busco.

«Qué diferencia de distinguir a otra persona de la otra ni que ocho cuartos...» ruedo los ojos

Desde que se pronuncia la palabra sexo, siempre se hará relevante.

El sonido de la puerta me saca de mí debate mental.

—¿Sí?

—Vela, hay un chico que pregunta por ti haya fuera —el rostro de la hija de mi prima, Jimena, aparece detrás de la puerta.

—¿Un chico? —pregunto desconcertada.

—Sí. Dice que se llama Max —casi me atragantó con mi saliva

—¿Max dices? ¿Pero qué hace aquí? —sacudo la cabeza sin entender. Me paro de la silla.

—Eso pregúntaselo a él —Rueda los ojos y se esfuma de mi habitación.

La detesto. Pero de todas formas tiene razón. Me miro al espejo, paso mi mano por mi cabello y desarrugo mi vestido morado. Me miro por última vez examinado que no haya ningún defecto en mi cuerpo, suelto un suspiro y me decido en salir.

Lo primero que me encuentro al llegar al salón es el rostro de Max, sentado en el sofá con la cabeza escondida entre sus manos. Vuelvo a echar un suspiro.

—¿Qué haces aquí? —Es lo primero que le pregunto, él levanta el rostro y se me congela el corazón al verle sus ojos hinchados y su rastro pálido.

Aprieto la mandíbula fuertemente junto con mis manos, con mucha fuerza, siento mis uñas clavarse en las palmas de mis manos. Se levanta del asiento no sin antes tomar un folleto del sofá. Eleva sus manos hacia mí entregándomelo sin decir nada.