–No te preocupes. Abre los ojos grandes.
– ¿Qué es eso?
–Pestañas postizas.
–Ni siquiera sabía que era.
– ¿En qué mundo vives?
–Yo nunca salía de mi casa, ni siquiera estudiaba…
– ¿Cómo qué edad tienes?
–Quince años.
–No puede ser, –Rosado se asombró por completo –no me mientas.Al ver que Ema alzó las cejas y también los hombros, dijo.
–Lo lamento mucho Ema.
–No te preocupes, yo si decía, la vida se está demorando mucho para verme sufrir, y era que me tenía esta gran sorpresa. –su sarcasmo fue tan notorio que Rosado la abrazó –
–Yo también pasé por esto, sé que no es fácil, ya llevo casi cuatro años aquí. Y ha sido duro, muy duro no poder ver a tu familia, a tu mamá, –Rosada comienza a llorar desconcertada.
–Tranquila, ya todo estará bien, no debes llorar. Tenemos que ser fuertes como rocas, no podemos dejarnos pisotear. Vamos a planear un pan de escape, ¿Qué dices?
–Ay cariño, que inocente eres. No eres la única que lo ha pensado, ¿sabes cuanta gente ha sido devorada por caimanes por intentar o solo pensar hacerlo? –Ema habló rápidamente –
–Pero no es imposible.
–Al parecer si lo es, aquí hay más de dos mil cámaras, con más de dos cientos números merodeando siempre el lugar.Ya las pestañas de Ema estaban listas.
–Deja de mirarle el lado negativo a todo. Por eso es que aun estas aquí.
–Ya terminé, andate rápido, no dejes que nadie escuche que tienes en mente hacerlo porque ya sabes lo que te pasará.Ema se va un poco rabiosa a la habitación roja.
–Hola. –habla Ema.
–Toma asiento cariño. Te voy a maquillar rápidamente porque ya casi son las ocho.
– ¿Qué ropa me pondré? –pregunta Ema luego de echar su cabello hacia atrás.
–Por lo general siempre la dejan en tu cama.
–Sí, claro. Ya recordé.
– ¿Te dejaron ropa?
–Sí.
– ¿De qué color?
–Negro, algo así como una gata negra.
–Perfecto, siéntate.Ema hizo caso y esperó hablar con Rojo de cualquier cosa, pero ella era de pocas palabras, se concentró en el maquillaje para Ema, en ese momento se volvió muda.
Pasó media hora y ya Ema estaba lista.
–Ya puedes verte, cariño.
–Gracias.Ema se apresura a quitarle la cortina a un espejo grande que había ahí.
Sorprendida, sonrió. Y era algo extraño, desde que no ve a Look no había vuelto a sonreír.
Recordó las palabras de Look:
“Eres hermosa, quiérete, valorate, ama cada centímetro de tu ser. Mirate al espejo y estalla de alegría por la gran belleza que hay frente a el.”
A Ema se le aguaron los ojos e intentó llorar, pero fue interrumpida de dicha nostalgia por parte de Rojo.
–No puedes llorar se te correrá todo el maquillaje, por favor. No lo hagas.
–Descuida, ¿Cómo hago para irme?
–Ya viene un Número a llevarte.
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María Camila. [EDITANDO]
Художественная прозаEn su diccionario no existía la palabra amar, hasta que él apareció. La vida de Ema,una adolescente que a sus quince años se va de un hogar donde era maltrata por su padrastro tanto verbal como físicamente. Look, un chico quién llega inesperamente...