Martina Salucci es la hermana menor de Uccio, mejor amigo y mano derecha de Valentino Rossi.
Ella es una chica simpática y un poco inestable, sin dudas caprichosa.
El es un deportista serio y respetado.
Ella ama la moda y las fiestas.
El la ama...
Cuando terminamos de comer me ofrecí a lavar las cosas. Los chicos salieron a hacer moto cross y yo me quede acomodando la cocina.
V-Te decía que yo también te había extrañado- dijo vale cuando entro a la cocina y se apoyó en el marco de la puerta.
No dije nada, sólo le sonreí y seguí lavando los platos. Se colocó a mi lado y empezó a secar las cosas que yo le pasaba.
V- Entonces ¿como vas en Milán?, lo qué haces te gusta.
M- Milán es lindo, estudio moda así que es la ciudad perfecta para mi.
V- ¿Y porque no modelas?
M- No creo que sirva para eso sinceramente.
V- Porque?, eres muy bonita.- me sonroje- estás más grande y guapa que la última vez que te vi.
M- eso fue hace poco más de un año.
V- Si, pero hace un año yo estaba con Linda.- y si antes me había sonrojado ahora estaba como un tomate.
M- asistí nerviosa - por cierto, lamentó eso, hace mucho estaban juntos.
V- Yo no, no lo lamento. - este hombre iba a matarme y había llegado aquí apenas ayer.
M- Ya terminé. - me agarró del brazo.
V- Yo no.
Bendito sea Luca que apareció para salvarme.
L- Vale ¿vienes a la pista?.
M- Si claro, justo me estaba diciendo que se muere de ganas por correr eso que corren ustedes.- y salí rápido de allí.
.... escuche lo que hablaban mientras me alejaba.
L- ¿Que le hiciste?
V- Nada. ¿Vamos?
L- ¿Te gusta o algo así?
V- claro que no!, que dices Luca.
No debería pero su respuesta no me gusto.
......
Una vez que llegue a casa de mi hermano me duche, me coloqué mi pijama y a la cama. Ya era de noche, estuvimos todo la tarde en el rancho. No quise cenar tampoco.
A la mañana siguiente me despertó mi celular. Atendí sin mirar el número. En resumido, era Luca que quería desayunar.
Baje en pijama, no sin antes mirar la hora. 8:20, maldito Luca.
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Al bajar escuche hablar a Uccio, imaginé que mi cuñada estaba con el, pero me equivoqué, desayunando en la barra estaba Valentino, si, y yo en pijama. Genial Martina, genial.
Buen día! - dije al entrar a la cocina. Buen día- dijeron al unísono.
Los salude a los dos y me puse a preparar las cosas para desayunar con Luca, que aún no había llegado.
U- Te caíste de la cama?-
M- Ja, Luca viene a desayunar.- dije obvia
U- ¿Que pasa con Luca?- me miró atento
M- Nada- rodee los ojos- ahora no puedo desayunar con un amigo.- Valentino no emitía palabra. - además, es chico para mí, me gustan más grandes-
U- Como quieras. Me voy a cambiar y nos vamos.- Valentino asintió con la cabeza y siguió con su café.
Estaba de espalda a valen, podía jurar que me estaba mirando el culo. Para rectificar mi pensamiento lo sentí detrás mío, me agarro de la cintura y me pego a el.
V-¿ Como de grandes te gustan? - me hablo al oído. Beso mi cuello suavemente reiteradas veces. Me di vuelta y quedamos frente a frente. El es un poco más alto que yo, pero igual podía sentir su respiración en mi rostro, esa mezcla de su perfume y el café era perfecto. Sus manos que estaban en mi cintura comenzaron a bajar. V-¿ Como de grandes? - insistió.
Escuche cómo sonaba el timbre.
M- Llego Luca.- me solté de su agarre y fui a abrirle la puerta. Otra vez Luca salvándome.
Valentino le hablo a Luca- ¿ No vas a entrenar? L- Desayuno y voy.-
En ese momento volvió mi hermano y se fueron con Valentino.
Desayunamos en la barra.
L- Le gustas, no soy tonto.- no le conteste, ni yo sabía que pasaba, lo único que hice fue poner cara de desentendida.
Cuando terminamos nos quedamos hablando un rato más, pero pronto se tuvo que ir.
L- Valentino me mata si tardo más. ¿ Nos vemos a la noche? M- Claro!
