Accident ; jjk {Book #1} » BTS. ✔ (En Edición)

v e n t i t r e s

-Gracias por todo, doctor Im.- estreché la mano del doctor, sacudiéndola de arriba a abajo levemente. Luego la solté y fue Jungkook quien le dio la mano.

-Fue un placer. La verdad es que fue el paciente más tolerante y se lo agradezco.- Jungkook sonrió y soltó la mano del doctor.-Aquí está su permiso firmado por mi de que esta ya de alta. Suerte con su banda, por cierto.

-Muchas gracias.- Kook hizo una leve reverencia y yo imité su gesto.-Me esforzaré mucho.- Él me tomó de la mano y empezó a caminar a la salida.-Al fin~.

-No me tomes la mano. O al menos no hasta que estemos en un lugar privado. No quiero que la gente suponga cosas que no son.- dije algo nerviosa. Él se paró en seco y se volteó a verme.

-Mientras tu estés conmigo no me importa lo que me digan los demás, la verdad.- sentí como la sangre se empezó a concentrar en mis mejillas y me sonrojé.

-No digas esas tonterías, Jungkook.- él soltó una risa y seguimos caminando hasta la salida, donde ya nos estaban esperando los guardaespaldas.-Bien, ya sabes la rutina de esto.

-Caminar los más rápido que pueda, correr si es necesario, no darle importancia a los gritos de odio que te digan.- en ese momento Jungkook interrumpió mi hablar con su risa.- y por último, si te quitan algo, dejalo ir.

-Eres rápida para entender.- yo sonreí orgullosa.- pero igual sigues siendo un poquito lenta.- mi sonrisa se borró en menos de lo que canta un gallo y le di un leve golpecito en el hombro. "Leve".

-Hijo de tu mamá.- me puse adelante de él y salimos por las puertas del hospital.

La verdad es que escuchar "Muerete" de un lado y "¡Te amo, Jungkook!" en el segundo que salimos me aturdió un poco, así que luego de haber salido lo que escuchaba era como si una manada de loros estuviera en mi oreja. Entramos a la camioneta y suspire.

-Hola, Señor Chong.- dijimos Jungkook y yo al unísono, lo cual nos causó una leve risita.

-Hola, hijos. ¿A dónde los llevo?- Me volteé a ver a Jungkook y él hizo lo mismo.

-¿Quiéres ir a tu apartamento primero? Para que dejes tus cosas.- justo en ese momento un bombillo se prendió y sonreí levemente.

-Si, pero llama a los chicos y diles que vayan también. - Jungkook fruncio el ceño y yo saqué mi teléfono y lo desbloqueé. Tenía una sorpresa para mi mamá.

~'~'

Le escribí a mi madre diciéndole que preparara una de sus mejores comidas como si viniera la familia entera. Ella no rechistó, pero me preguntó por qué, yo sólo la dejé en visto. Ella me dijo que quería conocerlos a los siete una vez, y no desaprovecharía la oportunidad. Toqué el timbre de la casa avisando que ya llegué y saqué mis llaves.

-¿Estás listo para conocer a mi madre?- le pregunté a Jungkook mientras introducía la llave en el cerrojo de la puerta, abriéndola.

-Me lo dices como si fuera un bestia.- reímos levemente y deje que Jungkook pasara primero.

-Bienvenido a mi dulce morada.

****

Pasé a al apartamento de Hee mientras me quitaba los zapatos ágilmente. Era un apartamento de tonalidades blancas, negras, marrones y grises bastante moderna. No habían candelabros colgando del techo, si no bombillos dentro del techo que le daban una luz tenue a la casa. La verdad es que me gustaba, era hermoso el lugar. Subí el escalón, tratando de no tropesarme con algún zapato y miré a los lados. Del lado izquierdo la sala y del lado derecho la cocina, donde supuse que estaba la madre ya que olía demasiado bien como para explicarlo.