Pequeña de ojos azules- Alec Lightwood

Capítulo 5

El viaje en dirección al Instituto fue en silencio hasta la mitad, cuando Alec no pudo soportar más y comenzó a hablar con su amiga, intentando alejar la tristeza que la rodeaba. Reían y charlaban sobre tonterías hasta que una llamada de Jace interrumpió el bonito momento.

Inicio de llamada

—¿Qué quieres?—

—Encontramos la copa. Necesito tu ayuda—

—¿Dónde estás?—

—En la comisaría de Luke—

—Estaré ahí en 5—

Fin de llamada

—Debemos ir—comentó Bekah, asustando a su amigo que seguía pensando en la llamada.

—¿Escuchaste?—preguntó confundido.

—A veces olvidas que tengo oído sobrenatural, Gid—respondió divertida.

Rieron por algunos segundos, porque ella tenía razón. Alec olvidaba lo asombrosa que era, a veces.

—No quiero ponerte en riesgo, Hadita—dijo el moreno poniéndose serio.

—No lo harás—afirmó mientras le regalaba una sonrisa tranquilizadora.

—Prometeme que no te separarás de mí, por favor—

Se dieron un pequeño abrazo para después cambiar el rumbo hacia la comisaría. Antes de llegar, Alec le envió un mensaje a su hermana para que también vaya a ayudarlos.

—¿Por qué tardaron tanto?—preguntó Jace cuando estaban llegando—Hola Becks—saludó a la chica con una sonrisa.

—Yo pregunto lo mismo—contestó Alec molesto, más por esa sonrisa que por la tardanza de su hermana.

—Eso no importa ahora—dijo Bekah restándole importancia al asunto— ¿Dónde está la copa?—

—La perdimos—dijeron Clary y Jace a la vez.

—Esto es un desastre—comentó el moreno, frustrado.

Bekah pudo notar la tensión que provenía del cuerpo de su amigo y se acercó suavemente para tomar su mano. Sabía el peso que cargaba sobre sus hombros y no le gustaba que pasara por eso solo. Una sonrisa le fue regalada por su acción y se la devolvió satisfecha.

—Gracias—susurró Alec tan bajo que sólo su amiga podría escucharlo.

Ese tacto había conseguido relajarlo y realmente lo agradecía.

—¿Que sucedió?—preguntó Izzy, llegando a la escena.

—Tenemos la copa. Pero la perdimos. Hay que entrar a recuperarla— contestó Jace.

—¿Un glamour?—

—Cualquiera que trabaje para Valentine podrá vernos—dijo Clary— ¿Un portal?—agregó mirando a la rubia que se mantenía en silencio al lado de Alec.

—No, ella solo puede llevarnos a lugares que conozca—dijo el moreno con la molestia impresa en la voz.

Éste quería mantener a su amiga lo más lejos del peligro posible.

—Entonces haremos esto. Ustedes tres—dijo Jace, señalando a Izzy, Bekah y a Alec—Provocarán un apagón y nosotros buscaremos la copa—