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Los días pasaron raudos como el viento, y sin darnos cuenta, llegó el día del estreno, estaba supernerviosa ya que Tom me iba a presentar en sociedad, cosa que James no se atrevió a hacer y horas después me iba a presentar a su madre,aunque Tom había ido cada día a ver trajes, yo le tenía una grata sorpresa para él, la cual se la enseñaría al llegar al estreno.

Horas más tarde, cuando llegamos al lugar en el que se estrenaría su nuevo trabajo, me presentó a sus compañeros de reparto, entre los cuales se encontraban Chris Hemsworth, Jeff Goldblum, Mark Ruffalo, y a sus respectivas parejas, quienes vestían elegantes vestidos, y fue entonces cuando ví que había llegado el momento de darle mi sorpresa a Tom, y en ese momento, en medio de la alfombra roja, me quité mi abrigo, dejándo ver el vestido que llevé en la fiesta de su majestad, aunque, claro está, le hice unos arreglillos,  las mangas, las había convertido en un chal y el escote del vestido,  lo había remendado forma que quedase al clásico estilo de un  "palabra de honor".

- ¡ ( T / N )! - dijo Tom al percatarse de qué vestido se trataba- Estás hermosísima- dijo sin cortarse un pelo

-Gracias - contesté

- No merezco una mujer tan hermosa como tú- me susurró al oído

- Claro que si, además, la barba te favorece mucho- contesté

El resto de la velada nos la pasamos separados, yo con las acompañantes de los chicos y sus hijos e hijas, mientras que Tom estaba con sus compañeros de rodaje, de los cuales, cada cierto tiempo, uno se separaba del grupo y venía a hablar con nosotras de cualquier tema,normalmente, se acercaban a hacerme preguntas, para ver si eta de fiar o si le iba a hacer daño a Tom.

Tom y yo, estuvimos a punto de  irnos, cuando,  de repente, Chris se me acerca con una  sonrisa de oreja a oreja.

- Gracias - dijo - Por alegrarle la vida a Tom, la verdad es que llevaba ya un tiempo que desde de que le dejase Taylor, ha estado siempre de capa caída.

- De nada- dije, haciendo una pequeña reberencia con la cabeza

Instantes después, Tom y yo nos despedimos de todos y nos fuimos a recoger a su madre, quien nos esperaba en la puerta de casa, y con quien íbamos a pasar una velada en un restaurante muy famoso no muy lejos de ahí, en el cual, escuchabas música country en vivo.

Y no fue hasta que llegamos al restaurante, cuando conocí en persona a la mujer que trajo a mi amado a este mundo, a mi mundo, dejándome en deuda con ella pues nunca recibí tesoro más preciado como el que era Tom.

La Maldición de la VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora