#2: El primer gato

15: Una discusión letal

Zarpa Tormentosa buscaba a Cola Lluviosa con ayuda de una patrulla. Tormenta Moteada, Manto Rocoso, Garra Veloz y Flor Crepuscular, ahora nuevamente guerrera, formaban parte de ella.

Los gatos se acercaron a la frontera con el Clan del Viento. Manto Rocoso estaba al frente. La suave brisa proveniente del territorio ajeno trajo el olor de una gata.

-Enemigos.-murmuró el gato marrón, erizando el pelo.

-Espero que no sea una amenaza.-maulló Zarpa Tormentosa.

-No pasa nada. Está en su territorio.-Flor Roja rozó con la punta de su cola la oreja del aprendiz. No era un secreto que lo quería como a un hijo. El gato negro se sintió avergonzado con sus caricias. No le gustaba que lo trataran como a un cachorro.

-Creo que deberíamos regresar.-aconsejó Tormenta Moteada.

Todos asintieron. La gata giró y volvió sobre sus pasos, seguida de la patrulla. Sin embargo, Zarpa Tormentosa escuchó un susurro entre la hierba y sintió curiosidad.

-Los alcanzo luego, ¿sí?

-No pero...-discutió Flor Crepuscular.

-Déjalo. Ya es grande.-la interrumpió Garra Veloz.

Giró hacia Zarpa Tormentosa.

-Ve.

Todos se fueron, dejando su característico olor a su paso.

El aprendiz oyó el sonido de nuevo. Avanzó unos pasos y se adentró en el territorio del Clan del Viento.

De pronto, Zarpa Tormentosa sintió un peso sobre él, inmovilizándolo. Trató de librarse de su enemigo, pero no pudo. Las garras de su contrincante estaban clavadas en su lomo. Zarpa Tormentosa giró, aplastando al atacante. Un gritó ahogado sonó debajo suyo.

-¡Déjame!-gritó una voz.

Era una hembra. Seguro era la gata que había captado la patrulla hace no mucho. El aprendiz se levantó y retrocedió.

Una bonita hembra atigrada gris de ojos verdes se incorporó. El gato marrón se quedó mirándola boquiabierto.

-Ho...hola. Soy...Tormentosa Zarpa. Eh...Zarpa Tormentosa.-tartamudeó.

-Me llamo Zarpa Gris.

La gata le guiñó el ojo a Zarpa Tormentosa.

-¡Zarpa Gris!-tronó una voz.

-Ups. Es mi mentor. Debo irme.-se lamentó la gata del Clan del Viento.

La bella gata desapareció entre la hierba.

Zarpa Tormentosa cazó de camino. Se sentía muy feliz por haber conocido a Zarpa Gris. Nunca le había sucedido algo similar. Cuando llegó al campamento, ya estaba oscureciendo. Patas Rojas se acercó al él.

-Te perdiste la ceremonia de tus amigos.-susurró, con cierto enfado.

Zarpa Tormentosa se disculpó y fue a saludar a los nuevos guerreros.

-¡Brisa! ¡Naranjo!-saludó Zarpa Tormentosa.

-¡Hola! Ahora somos Brisa Nevada y Corazón de Naranjo.-informó la gata blanca.

-Son unos nombres muy bonitos. Felicidades. Serán unos guerreros excelentes.

-Gracias.-maullaron los dos al unísono.

Brisa Nevada siguió a Cola Manchada, que quería hablar con ella. Zarpa Tormentosa vio a Cola Lluviosa y a Hoja Plateada peleando en la entrada de la guarida de Estrella Leonada. Corazón de Naranjo siguió su mirada y suspiró.

-Han estado así desde que llegó. No paran de pelear. Ah, y Tormenta Moteada ayudará a Patas Rojas. Qué buena noticia, ¿no? Como ella te gusta...

A Zarpa Tormentosa se le erizó el pelo.

-Perdóname. No quería hacerte...-trató de disculparse el gato naranja.

Zarpa Tormentosa saltó sobre Corazón de Naranjo, pero algo se interpuso entre ellos. El aprendiz le clavó las garras con toda fuerza al entrometido hasta que gritó y la sangre salpicó su rostro, cegado por la furia. <<Es muy suave y ligero>> pensó Zarpa Tormentosa. Un cuerpo gris claro y con pelo espeso cayó.

-Zarpa Tormentosa, no te preocupes...Cuida a Brisa Nevada por mí, ¿quieres?-pidió Nublosa.

-¡Nublosa! ¡Nooo! ¡Madre!-chilló Brisa Nevada a lo lejos.

La gata blanca se acercó a toda velocidad con lágrimas en los ojos. Zarpa Tormentosa miró horrorizado lo que había hecho. 

-Los veo en el Clan Estelar...-susurró la gata.

Zarpa Tormentosa retrocedió unos pasos mientras que el clan, enfurecido, gruñía y siseaba. Había asesinado a la querida madre de Brisa Nevada, a la amiga de Patas Rojas.

Había asesinado a sangre fría a la gata más querida en el clan.

-N..No es posible.-dijo con un hilo de voz el aprendiz.