Capítulo 6

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El viento movía suavemente las hojas de los árboles, era una noche despejada y tranquila, similar a muchas otras noches, pero la diferencia era ésta había sido marcada por la tragedia. Como muchos dicen, las tormentas siempre llegan después de las calmas prolongadas, y al parecer una vez más se cumpliría esa eterna predicción.

- Ellos creen que yo fui quien mató a Shisui – Decía Itachi con expresión seria, pero su voz no denotaba más que enojo y decepción. La que sentía por su gente después de haber sido acusado injustamente de la muerte de su amigo. Había perdido la compostura al recibir las indirectas acusaciones de algunos miembros del clan, no pudo contenerse y ser paciente como era costumbre así que les dio una paliza y hasta les habló duramente acerca de los muchos errores que habían cometido los Uchiha y que pronto los llevarían a la ruina. Admitía que aquel había sido un grave error, principalmente porque su hermano escuchó todo y no tuvo más opción que pedir disculpas ante los miembros que desconfiaban de él para aliviar el malestar de Sasuke y el suyo propio.

Kaede le pasó una mano por la espalda y le acarició el hombro para darle apoyo, tenía la firme creencia de que en muchas ocasiones el contacto físico servía para aliviar un poco el dolor del alma.  Ambos se habían conectado muy especialmente desde la muerte de Shisui, ocurrida pocos días antes. Se abrían mutuamente cómo si nunca hubieran sido distantes, era extraño pero también muy agradable.

Itachi se encontraba muy solo, no solo cargaba con la desconfianza de todo un clan si no que llevaba siendo utilizado durante toda su vida por los dirigentes de la aldea. Mientras que ella había sido apartada de la sociedad desde sus primeros años de vida, Danzo solo la utilizaba para beneficio propio y la gente de la aldea parecía despreciarla.

Levantó la cabeza y miró a Kaede sorprendido por aquel gesto cargado de buenas intenciones que casi nadie solía tener con él. Muchas chicas de la aldea acostumbraban a coquetearle sin escrúpulos debido a su buen físico e inteligencia pero solo su madre le ofrecía cariño verdadero, aunque a decir verdad, Mikoto le daba lo mejor de sí a todo el mundo, pero desafortunadamente él había perdido la cercanía con ella hacía bastante tiempo.

- ¿Qué dijeron los ancianos cuando se enteraron de la muerte de Shisui? – Preguntó la chica ignorando la sorpresa en los ojos de Itachi.

- Cuando les dije que Shisui había desaparecido y luego fue encontrado muerto, decidieron proclamar la teoría de suicidio como un hecho. Creen que su muerte solo sirvió para agrandar las posibilidades de golpe de estado y por lo tanto lo mejor que se puede hacer ahora es eliminar al clan – Cerró los ojos y alzó la cabeza al aire, por lo visto las posibilidades de salvar a los Uchiha ya habían expirado y eso lo hacía sentir muy triste.

- Cada día aumentan más los problemas - Continuó -  últimamente alguien ha estado entrando en repetidas ocasiones al distrito Uchiha violando la barrera de detección que rodea a Konoha, los consejeros creen que ellos están planeando algo grande.

-  ¿Tú sabes quién es el que está entrando al distrito, cierto? – Algo en el rostro de Itachi le decía que él estaba un poco confundido, pero aun así  por obvias razones si alguien se infiltraba en su territorio sería el primero en saberlo.

- Si- Respondió secamente.

- ¿Y bien?

- No puedo decírtelo – Contestó negando con la cabeza – No es seguro que lo sepas ahora.

- Entiendo... - No, no entendía ni mierda ¿Qué era lo que estaba sucediendo entre las sombras últimamente? A pesar de que empezaba a comunicarse con Itachi mas amenamente, él aun guardaba demasiados secretos.  Ese chico era más profundo que el mar, parecía saberlo todo pero nunca decía nada y eso era más que motivo suficiente para hacerla sentir estresada. Lo único que podía hacer era calmarse y tratar de comprender la razón por la cual él aún se negaba a confiar completamente en ella, estaba más que segura que todo era culpa de su padre Danzo.

Guerra de EngañosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora