Capítulo 34

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Tres días después

Victoria's POV

— ¿En serio no quieres que te acompañe?—Pregunto Allyson desde la cama, negué mientras termina de organizar los planos. La pelinegra había estado insistiendo en acompañarme a mi reunión con Elizabeth al principio lo había pensado pero luego decidí enfrentarme a ello por mí misma.—No te preocupes, Allyson voy a estar bien, sólo es una reunión .—

Unos minutos después ya estaba rumbo a la empresa de los Davis. Me detuve en un semáforo dejando salir una gran bocanada de aire, estaba nerviosa, la había visto con una chica en el restaurant, lo más probable es que fuera su nueva conquista.

Admito que eso me dolió más de lo que pensaba pero intentaba disimularlo, era obvio que no lo hacía muy bien, Allyson, mama A, papa S e incluso Abby había notado mi incomodidad.

El sonido de un claxon me saco de mis pensamientos haciendo que avanzara hacia la empresa llegue y tome una larga bocanada de aire antes de bajarme del auto.

Unos minutos más me quede en el auto pensando en si sería la mejor idea salir del auto. Cerré los ojos y tome otra bocanada de aire tomando la fuerza necesaria.

—Vamos Victoria se profesional.—Salí del auto y me adentre a la empresa, en la secretaria me guío por un ascensor privado que daba a las oficinas de John, Elizabeth y otras personas de alto rango en la empresa.

Nos detuvimos en el piso quince donde la primera persona que vi fue la chica que estaba con Elizabeth en el restaurant.

—Bienvenida señorita Harrison, la señorita Davis la está esperando.—Dijo dándome la mano con cordialidad, la estreche gustosa, la chica me llevo hacia una puerta enorme donde nos anunció y lo único que se escucho fue el "Adelante" Casi inaudible de Elizabeth.

La oficina de Elizabeth estaba perfectamente ordenada y los muebles estaban muy bien distribuidos. Al lado izquierdo de la oficina se encontraba un mueble en forma de L negro de cuero con unos cojines rojos muy elegantes. En el medio de la oficina, adelante del gran ventanal con la vista panorámica de Londres se encontraba el enorme escritorio de Elizabeth con ella detrás de él.—La señorita Harrison.—

—Toma asiento.—Ordeno sin quitar su vista del ordenador, la chica me acompaño hasta allí y luego salió de la sala.—Bien, he estado leyendo todos los materiales que necesita para la obra y estoy de acuerdo con usted. No importa el costo si no la calidad de los materiales y más si es para los niños del Child Smile.—Su mirada estaba puesta en unos documentos, la Castaña estaba usando gafas de lectura.

Elizabeth alzo la vista y su mirada ya no era la misma de hace años atrás, está ya no tenía su calidez ni su picardía. Estaba vacía. –También quería hablar contigo sobre, la infraestructura. —Hable por primera vez. Señalando los planos que estaban en mis manos. –¿Puedo?—Dije señalando un espacio en su escritorio, ella asintió coloque los planos allí.—Mira aquí.—Señale donde estaban las habitaciones.—Pienso que deberíamos ampliar las habitaciones y la zona de la biblioteca. No sé ¿Qué opinas? –Dije mirándola. –Me parece una buena idea, también podría ampliar el área del comedor y la cocina. — Me estaba tratando de manera profesional y no sabía cómo sentirme.

—Sí también tenía pensado decírtelo. —Antes de que Elizabeth contestara algo, la puerta se abrió abruptamente haciendo que me sobresaltara. –Grandísimas perras.—Jane había entrado en la oficina cual demonio de Tasmania, su enorme cartera ya estaba tira en el sofá, Elizabeth se dejó caer en la silla con pesadez mientras dejaba salir un enorme suspiro y se frotaba el puente de la nariz.—¿Jane que haces aquí?—Dije intentando pasar el susto que segundos antes me había causado.—Vine a visitarlas.—Dijo como si nada dándome un beso en la mejilla y caminando hacia Elizabeth.— Hola perra.—Dijo besándole la mejilla de la castaña.—Jane estoy trabajando en algo importante.—Elizabeth la reprendió.

Pelirrojo Enredo (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora