The Eyes Of The Devil// James Patrick March.[TERMINADA]

Capítulo 41

—Basta, cierra la maldita boca—

—Oh si no que James, ¿Me matarás?—río.

—Largate de mi habitacion ahora—

—La niña ya se cree la dueña de todo esto—rio.

—Por favor Querida yo fui antes dueña de todo esto y ni siquiera es tan bueno—

Queria arrancarle los ojos de su lugar, claramente no podía estaba muerta era un fantasma mas del Hotel Cortez.

—Largate Elizabeth—dijo James.

—Me voy pero esto aun no termina, menos para ti Emily— se marchó.

—Sr. March, ¿que trata de decir?—pregunte.

—Olvida a esa perra—

—Esta bien— hable algo pensativa.

—Continuemos con lo que empezamos-dijo.

Asenti.

No podia dejar de preguntarme lo que habia dicho.

James me tomo de nuevo por la cintura tumbandome a la cama, hizo salirme de mis pensamientos.

El me comenzó a besar. Siento como saliera de un trance para entrar a otro. Mucho más perfecto.

—Oh Sr.March usted es demasiado perfecto— susurre.

Se limito a contestar y prosiguió con sus besos que bajaban de mi cuello, y hasta mis pechos.

Sus manos viajaban por todo mi cuerpo, acariciaba cada parte de mi. Me tomo del cuello dejándome completamente inmóvil. Me hacia falta la respiración, pero vaya claro que el sexo con el es tan salvaje como lo es el mismo.

De un momento me tenia gimiendo bajo el, cada vez sus embestidas eran mas duras y salvajes, sus movimientos eran totalmente rudas, me hacia querer llorar, pero no lloraria  frente a el, no lloraria fentre al diablo.

—Te amo James—

—Emily—dijo al caerse junto a mi.

—Te amo mas— beso mis labios dulcemente. 

Y era lo que me encantaba de el, que podía ser tan salvaje y rudo, pero al final es todo un caballero que me trata como una princesa.

Nos paramos de la cama para darnos una ducha.

—¿Nos daremos la ducha juntos?—pregunte.

—Si, ¿tiene algo de malo?—

—No— sonreí.

Me jalo rápidamente hacia dentro del baño para ducharnos. Abrió el grifo, el agua helada hizo estremecer mi cuerpo, el lo noto. Me dio pequeño besos por todo el cuerpo.

Me pego junto a el, podía sentir todo su cuerpo junto al mio. Y se que es un fantasma pero era tan real el tenerlo junto a mi, sentir su cuerpo, sentir sus besos, sentirlo a el.

Me besaba con tanta pasión, bajaba hacia mi cuello y espalda.

—¡James me vas a volver loca!—

—Eso pretendo querida—

Después de la ducha nos vestimos para bajar a cenar al comedor del Hotel.

—Te ves muy linda hoy querida esposa— beso mi mano.

—Tu te ves tan perfecto hoy y siempre mi amor— sonreí.

Entrelazo su brazo con el mio, asi bajamos hasta llegar al comedor.

—Vaya vaya que bellos los esposos—dijo Liz.

Sonreí amablemente al verla.

—Sr.March espere, no vaya al comedor— su voz parecía algo angustiada.

—¿Hay algún problema Liz?—

—Si la madre de Emily esta ahi—

—¡No puede ser!—

Camine lo mas rapido que pude ya que traía tacones y me era casi imposible correr.

—¿Que diablos haces aqui? No te quedo claro maldita sea— grite. 

Ella giro para verme, su rostro era otro no expresaba para nada miedo.

—Hija que bueno que bajaste y no seas una cobarde—dijo desafiante.

—Oh madre te estas metiendo con fuego y lo sabes bien—

—No te tengo miedo, tu deberías tenerme miedo a mi— sonrió.

—¿Yo? ¿A ti? No serias capaz de matar ni un gato— reí.

—¿Tu serias capaz de matar a tu propia madre?—pregunto.

—Si es por James si—

—Vaya que ese tipo te tiene muy mal—

—Es mi todo madre, asi que largate de mi Hotel si no quieres que aqui mismo te corte la maldita cabeza para ponerte de lampara en el baño—grite.

—Calma hijita, los doctores viene por ti— habló tranquila.

—¿Que doctores?—pregunte.

—Manicomio, iras al manicomio—

—Eres tu la jodida loca largate tu al maldito manicomio yo no ire a ningún lado—

—Demasiado tarde hija—

—¡Sr.March!—grite.