ᴀᴅᴅɪᴄᴛɪᴏɴ • .¸ ♡ 𝒥𝒾𝓀ℴℴ𝓀 ♡ ¸. •

.12.

--Bien, eso es todo por hoy, no mueva mucho su brazo y así no tendremos que volver a enyesar--le digo a Jimin mientras dejo la ficha sobre la mesilla.

--Espera--me detiene antes de que logre salir de su habitación-- Quédate a comer conmigo--wow, él ni siquiera pregunta si quiero acompañarlo, simplemente ordena, creo  que comienzo a saber porque le gusta que le diga "Señor Park", solo quiere que obedezca  a sus palabras..

--Oh, lo siento pero no puedo hacerlo, si quiere llamo al Señor Min para que le haga compañía--escucho un pequeño gruñido por su parte, por lo que me giro divertido hacia él. Debo luchar contra el impulso de querer reír.

--Solo dile Yoongi , no hay necesidad de que le agregues la palabra "Señor", prefiero que solo te refieras a mi de esa forma--¿Que? ¿En qué momento le dije que haría lo que él me ordenara?--Y no quiero que él venga y aun si quisiera no podría venir, esta fuera del país con un grupo de idol, además te pedí a ti que te quedaras bebé, ya que te estoy regalando flores me podrías compensar comiendo conmigo.

--Dijiste que no me pedirías nada--Nunca confíes en alguien tan descarado como él, al menos he aprendido algo nuevo hoy.

--Hey, no lo pienses demasiado, solo es aburrido tener que comer solo--bueno, tiene razón, a mi tampoco me gusta comer solo, pero siento que si me quedo a comer con él estaría traspasando una línea que no estoy seguro de querer cruzar. Mordisqueo mi labio inseguro de lo que voy a hacer, pero parece estar tan solo, que me es doloroso imaginarlo comiendo ahí, en silencio, sin nada más que sus pensamientos y quiero saber ¿por qué? ¿por qué parece estar tan desolado?.

--Solo por esta vez--susurro--Iré a buscar mi comida, ya vuelto Señor Park--veo como su cabeza sube y baja con energía, me parece tan adorable la manera en que hace aquello que simplemente me apresuro a salir antes de que se de cuenta de que me he sonrojado.

Cuando estoy fuera de su habitación me tomo el tiempo de apoyarme contra la pared, mientras pongo una de mis manos en mi pecho, mi corazón se agita con fuerza golpeando una y otra vez, arrugo mi delantal entre mis manos y comienzo a tomar pequeñas respiraciones para que  mi estúpido e inconsciente corazón deje de moverse con tanto ímpetu.

--Por favor, detente--

Llego al salón de reuniones ya que Jin-hyung me dijo que me esperaría ahí para darme mi comida. Ah yo amo tanto a hyung por prepararme comida todos los días, probablemente si no fuera por él yo viviría a base de ramen y brochetas de cordero. Aunque eso no suena tan mal después de todo.

Empujo la puerta con una sonrisa en mi rostro, la cual rápidamente desaparece ante el espectáculo que hay frente a mi. Mingyu está con la enfermera Sun Hee besándose sin ningún recato. Ambos se detienen cuando notan mi presencia, las mejillas de Sun Hee se tornan rápidamente de un color rojo brillante, por el contrario Mingyu parece tan relajado como siempre. Esa es una de las razones por las que terminamos, pues yo tenía los cuernos más grandes que el mismísimo diablo .

--¡Lo siento!--grito dándome cuenta del ambiente incómodo que se forma entre nosotros, doy pasos hacia atrás mientras hago pequeñas reverencias. Sun Hee es la segunda en reaccionar y ella comienza a hacer lo mismo que yo, claro sin la parte de retroceder y Mingyu solo me mira con una extraña sonrisa.

--¿Kook?--la voz de Jin-Hyung detrás de mí provoca que de un pequeño saltito en mi lugar. ¿Por qué todo el maldito mundo me asusta? Joder.

--¡Hyung, Dios, deja de aparecer así, me asustas!--muy mala idea Jungkook, jamás de los jamases le grites a Jin-Hyung, si es que quieres seguir con vida.

--Tu...maldito mocoso irrespetuoso--antes de siquiera poder pensar en huir él me agarra de una de mis orejitas tirándome hacia quien sabe donde mientras me continúa regañando por ser un niñato irrespetuoso.

Luego de 10 minutos de regaño sin sentido me entrega mi comida, no sin antes preguntar porque no iré al casino a comer como siempre, a lo que solo logro responder un "Comeré con el señor Park, le debo un favor". ¡Yo ni siquiera le debo algo! 

--Pensé que te habías arrepentido--Jimin parece increíblemente sorprendido de que esté ahí, como si de verdad hubiera dudado de que volvería.

--¿Debería hacerlo?--

--Por supuesto que no--la convicción en sus palabras me hacen sonreír ligeramente y aunque no lo admita en voz alta, la verdad dudo que en algún momento me arrepienta de estar junto a él en estos momentos.

--No lo entiendo--menciona de pronto, dejo mis palillos aun lado mientras la confusión se presenta en mi--Tienes una voz hermosa, pero eres doctor, eso no tiene sentido, hubieras sido un gran artista bebé.

Creo que en algún momento tendremos que hablar de la forma en la que se refiere a mi, porque vamos, puedo tolerar que me diga Jungkook como si tuviéramos toda la confianza del mundo, pero ¿bebé? eso es demasiado.

--Tener buena voz no creo que sea suficiente--me encojo de hombros quitando importancia en  el asunto.

--Tú no tienes solo una "buena voz", deberías verte y oírte, cuando cantas parece como si hubieran colores a tu alrededor, como  si cada parte de ti dijera "Mírame y siente, siente cada palabras que estoy diciendo, sufre, llora, canta, ríe, vive" Trasmites todo eso con solo cantar.--bajo mi cabeza avergonzado, es la primera vez que me dicen aquello. Ahora que lo pienso él se está volviendo muchas de mis "primeras veces", eso es un tanto extraño.

--La verdad...en algún momento pensé en presentarme en alguna compañía--le cuento--pero finalmente decidí que quería ayudar de otra manera...además de que me dio miedo.

--¿Miedo de qué?--la forma en que frunce su ceño a la hora de mostrar desconcierto lo hace ver aun mas guapo de lo que es normalmente, quiero llevar mis manos hasta su rostro y saber si es tan suave como lo parece, aunque su frente si lo es, cuando la toqué con mis labios se sintió cálido, como si fuera algo totalmente nuevo y aun después de apartarme de él podía sentir su calidez en ellos y su aroma envolverme como una suave y delicada capa.

--Estoy seguro de que lo sabes, yo simplemente no me sentía capaz de enfrentar todo eso, las horas y horas de ensayo, las cámaras sobre ti todo el tiempo, el que las personas esperen demasiado de ti y que otra disfruten cuando no puedes hacerlo, yo creo que es demasiado difícil y agotador soportar todo eso--él sonríe, pero es de esas sonrisas que son dolorosas de ver y no se que hacer cuando sus ojos parecen empañarse. Nunca he sido de las personas que disfrutan estar sobre otra todo el tiempo yo aprecio mi espacio y espero que los demás también lo hagan, así que no sé que es lo que me impulsa a ponerme de pie y rodear su cuerpo con mis brazos hasta traerlo hacia mí.--No pongas esa cara, por favor Señor Park, se ve mucho más guapo cuando sonríe y sus ojos desaparecen.

--Tienes razón--susurra, coloca su cabeza en mi hombro y con su brazo bueno me corresponde el abrazo. --Demasiada razón--no estoy seguro de si lo dice porque le dije que era guapo o si hay algo en mis anteriores palabras que lo afectaron. Lo único que sé, es que el hombre junto a mi ahora parece tambalearse como una hoja al viento, tan frágil y perdido, que creo que si lo suelto se estrellara tan fuerte contra el suelo que se romperá en miles de pedacitos.

Porque quizás no quiera que te rompas junto a mi, porque quizás te has adentrado un poquito en mi corazón.