When Death Loved Me (Yoonmin)

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-Jimin-

Mi tío me llamó, quería avisarme que esta noche no vendría a hacer la cena porque tenía su cita con el sujeto de la película. En realidad no me daba buena espina, ¿qué tan seguido conoces a alguien que por casualidad te encuentras en una tienda y te ofrece invertir en una película? Estaba preocupado por mi tío Jin pero él estaba demasiado emocionado como para racionarlo. Le dije que me tuviera informado de todo. Él me envió la ubicación de donde se encontrarían y prometió llamarme tan pronto terminara su reunión.

Eran las 11 de la noche, aún no tenía noticias de mi tío. Cada que le llamaba a su teléfono, me sonaba desconectado.

-Tal vez el tipo se lo robó y lo pondrá a trabajar como un esclavo sexual- me decía Taehyung con cara de espanto.

-Tiene sentido, el tío Jin es guapo, ganará mucho dinero- se reía Jungkook.

-¡CÁLLENSE! ¡Sus comentarios no ayudan en nada!- estaba empezando a entrar en pánico.

Taehyung y Jungkook me miraron asustados, eran contadas las veces que me enojaba o me ponía así de histérico. No podía más, tomé mis llaves y salí a la cafetería donde supuestamente tuvieron la junta.

Me tomó al menos 15 minutos en llegar, corriendo. Pegué mi cara al vidrio del lugar que se encontraba más o menos lleno. Ahí, al fondo los vi. Jin me quedaba de frente y podía ver una gran sonrisa en su rostro mientras hablaba animadamente con un sujeto frente a él. Sólo podía ver su espalda. Iba vestido de traje, era rubio y se veía esbelto y más pequeño en comparación con el tío Jin.

Mi tío alzó la mirada y encontró la mía. Me miró confundido y me saludó con la mano. Me sentía ridículo ahora, las personas sentadas cerca de la ventana me veían incómodas. Jin me hizo un gesto con la mano para que entrara, hubiera sido muy vergonzoso no entrar así que le sonreí y entré al local, caminé hacia la mesa donde se encontraban sentados.

-Jimin, ¡qué sorpresa! ¿Pasó algo?- me miró preocupado.

-Sí. No. E-es que...te llamé y no contestabas y me preocupé un poco- lo miré avergonzado.

-¿Por qué te preocuparías?-me miró con una leve sonrisa en el rostro.

-Quizá tuvo miedo que te sacara los órganos y te arrojara a un callejón, es razonable- dijo el rubio sentado a un lado mío. Su voz sonaba tan ronca y tan agradable que no pude hacer nada más que mirarlo con una sonrisa en la cara.

Mis ojos encontraron los suyos, eran grises...no, no...eran más brillantes. Resaltaban a la perfección con su blanca piel y el color oscuro de su traje. Era demasiado atractivo para ser real.

-Oh, sí. ¡Qué grosero soy! Jimin, él es Yoongi, es el hombre de quien te hable. Él es mi sobrino, Jimin, él trabaja en la tienda de películas- dijo mi tío apretando un poco mi hombro.

Yoongi se levantó de su asiento parándose muy cerca de mí, hizo una profunda reverencia y mirándome fijamente me dijo:

-Es un verdadero placer conocerte, Jimin- una sonrisa de lado apareció en su rostro y yo me derretí por dentro.

-U-un...un placer Yoongi- dije lo más controlado posible.

-Ya que estás aquí, siéntate Jimin, tómate algo- dijo mi tío haciéndole una seña al mesero.

-N-no no yo sólo venía para asegurarme que estuvieras bien, no quiero importunar nada-.

-En realidad, tu tío y yo comentábamos algunas películas en común. No importunas en absoluto- me dijo Yoongi y por un segundo estuve a punto de sentarme.

-No, de verdad. Quedé de cenar con los chicos- fue la primera excusa que pude pensar- pero nos veremos luego, hasta pronto- dije haciendo una reverencia a ambos.

-Por supuesto, nos veremos...luego- Pude oír la voz ronca de Yoongi arrastrando las palabras.

Maldición, se me doblaban las rodillas. Tenía que salir de ahí.