La chica mala (Luke Hemmings/5SOS) [EN EDICIÓN]

Capítulo 4

Me dí una ducha fría, mi cabeza dolía debido al golpe de ayer. 

Luego de aquello, Michael se había quedado en mi habitación. Había escuchado todo. Cuando pasaba aquello, siempre estaba ahí para consolarme.

No sé que haría sin Michael. 

Terminé de vestirme y maquillar, para luego tomar una leche e irme al instituto.

Saqué los cuadernos de mi casillero. Luke se acerca a mí .

-Hola.

-Hola. - Respondo.

-Nos toca química, ¿verdad?

-Sí. ¿Sabes dónde es? 

-Precisamente por eso vine hacia ti. - Solté una risa.

-Vamos. 

Llegamos hasta la clase. Nos sentamos juntos. Saqué mi cuaderno y libro, para colocarlos en la mesa. 

-Luke, voy al baño. - Asintió. 

Me dirigí al baño y me miré en el espejo. Lavé mi cara con agua fría, ya que mi cabeza segía doliendo.

Pasaron tres chicas con vestidos apretados, mientras reían.

Maldición. 

Aquí vamos de nuevo.

-¿Qué hace un bicho raro maquillándose aquí?

Me giré hacia ella, para luego sonreír. 

-No sé si te habrás dado cuenta, pero sólo estaba lavando mi cara. ¿Eres así con todos? - Tenía que mirarla hacia arriba.

-No puedo hablarle de la misma forma a todos, linda. Las personas inferiores a mí, merecen ser tratadas como basura, chiquita. 

-¿Y quién mierda eres tú para decir que hay personas inferiores a ti? 

Esta tipa comenzaba a hartarme, de verdad.

-Oh vamos, es bastante obvio. Sólo mírame, y luego mírate a ti. Ahí es fácil decir quién es inferior a quién, ¿No? 

-¿Por qué? ¿Eh? - Me acerqué a ella.

-Oh cariño, no vengas a hacerte la matona aquí. ¿Quieres que hable? - Suelto una risa.

-¿Qué dirás? Vamos, dime. 

-Todos sabemos lo que pasa con tu padre, Jennifer. Dime, ¿ya te tocó? - Las tres sueltan una risa. -¿Lo hizo al igual que tu madre? ¿O es que te estás tirando a todos, al igual que tu madre? 

Esto sí que no se le iba a aguantar.

Comienzo a agarrarla del pelo, tirándola al suelo. Allí comienzo a pegarle patas. Ella también se defendía.

-¡¡Te metiste con la persona equivocada perra!! 

Las otras tipas comienzan a golpear, trato de pegarles, pero se me hace imposible. 

-¡¡¡Alguien sáqueme a esta loca de encima!!!!

Sentí que alguien me agarró de la cintura y me sacó de allí. Sólo pataleaba y movía la cabeza de un lado a otro, gritando.

No la iba a dejar escapar, no cuando insultaban a mi madre.

No sabían la hermosa persona que era. 

-¡Déjame! ¡Suéltame imbécil!

-¡Tranquilízate Jennifer! - Luke me sujetaba fuertemente de la cintura.

Le pegué una patada, haciendo que cayera al suelo bruscamente. Me paré del suelo adolorida, pero me dirigí hacia la chica de nuevo, para volver a pegarle una patada. 

-¡¡¡Atrévete a decirle puta a mi madre de nuevo!!!

Grité cuando me llevaron a la fuerza de nuevo. Me llevaron a otro lugar y me sentaron en el suelo. Me tranquilicé y vi a Luke parado al frente mío.

-¿Que mierda intentabas hacer?

-Defender a mi madre.

-¿Estas loca Jennifer? ¡Te podrían suspender!

Me paré para gritarle. Él me gritaba, yo le devolvía el doble. 

Así era Jennifer Clifford.

-¡No eres mi padre para decirme que mierda tengo que hacer Hemmings!

Grite tan fuerte en su cara que todo el mundo escuchó. 

Bien, lo que faltaba. 

-Clifford, a mi despacho. - El director aparece en frente mío. 

Me separé bruscamente de Luke. Era un completo imbécil. 

Maldito idiota.

Mientras caminaba al despacho, Michael me vio. Negó con su cabeza.

[...]

Salí del despacho.

Le expliqué la situación al director, y el muy maldito, me suspendió. 

Logré ver a los chicos en una mesa, menos a Luke. Me senté con ellos. 

-¿Y? - Michael me miró serio. 

-Tuve una pelea con Jodie. 

-Todos pelean con ella. Es una persona horrible. - Calum bebe de su jugo.

-Si, estoy suspendida. Debo irme ahora a casa.

-Hablaremos allá, Jennifer. - Michael me miró serio. Asentí.

Me levanté del asiento, para ir a buscar mi skate e irme a casa.

Cuando iba saliendo, me encontré a Luke consolando a Jodie.

¿Y este que se cree? 

No puedo creer la urgencia que tienen los chicos por buscar a una mujer. 

Maldito idiota.

Sabía que era un mujeriego.

Antes de irme, le dediqué una mirada de odio. 

Muérete, Luke Hemmings.