Capítulo 9

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-Luke, tengo que irme

-Por favor, quédate un rato más.

Me tomó la mano e hizo puchero. Se veía tan tierno, quería quedarme, pero no podía, si papá no me veía en la casa, me llevaría unos buenos golpes.

-Luke, encerio, no puedo

-Por favor

-Luke...

Escuché un auto estacionarse. Miré "disimuladamente" (Giré la cabeza rápidamente como si no hubiera un mañana, para mi eso era disimular) y ví el auto de mi padre. Mierda

-Adiós Luke, cuídate

Lo besé en la frente. Por que rayos hice eso??

Salí corriendo hacia mi casa y fuí hacia el patio. Ahora como entro? Escuché a mi padre abrir la puerta. Salté la valla rápidamente y caí al suelo, seguramente me había dejado un moretón que no iba a salir por semanas.

-Jennifer!!! Donde estás?!?!

Me paré con la pierna adolorida y grité

-Aquí!!!

Traté de abrir la puerta del patio, imposible, Tenía seguro

-Que haces ahí?

-Mmm.., salí a tomar aire

-Sal de ahí!!!

Abrió con fuerza la puerta y me tiró el brazo hacia adentro. Sentí que sus dedos me quemaban la piel, grité de dolor.

-Cállate niñata estúpida!!!

Me tiró en el sillón mientras me golpeaba y yo pataleaba como una loca, tratando de que no me tocara.

-Thomas déjala!!!

Se acercó Mike y se puso delante mío, evitando que mi padre me golpeara

-Muévete Michael

Mike se quedó callado y no se movió. Se giró a mí y me ayudó a levantarme. Subimos las escaleras, tratando de que yo no me cayera, con todo el dolor de mis piernas.

-Después verás como será la puta de la familia y nos dejará en vergüenza!!!

-Tu ya nos dejaste en vergüenza

Susurró Mike. Subimos a mi habitación y me senté en la cama llevándome las manos a la cabeza.

-Mike

-Dime

-A veces no quiero existir...

Mike me miró preocupado y a la vez, sorprendido. Yo lo miraba, con los ojos llenos de lágrimas y algunas empezaban a bajar sobre mi mejilla.

-No vuelvas a decir ni a pensar en eso si? Eres magnífica, y para que decir, aparte de hermosa

Sonreí. Mike decía que yo era igual a mi madre, en mi forma de reir, en mis ojos, en mi pelo...en todo.

-Duerme. Te quiero

-Yo igual te quiero.

[...]

Tuve que ponerme un jeans negro apretado y una polera negra para ocultar los moretones que había dejado mi padre y mi caída. Bajé y tomé desayuno con Mike, primera vez que terminaba antes que yo.

-A que se debe esto Mike?

-Que me quiero ir contigo.

Reí, salimos y montamos en nuestros skates.

-Uno...

-Dos...

-Tres!!!!-dijimos al mismo tiempo

La chica mala (Luke Hemmings/5SOS) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora