43. España

1K 70 14
                                    

Allison's POV

Era sábado en la mañana y estábamos a punto de abrir la cafetería de mis padres, yo estaba sentada en uno de los sillones más cómodos con algunos dulces que habían sobrado de navidad, mientras que Stile limpiaba unas cuantas mesas porque es un aficionado a la limpieza.

— ¿Qué no piensas trabajar? — preguntó mientras subía mis pies en una mesa, él los empujo. — Siéntate como una señorita.

— ¿Acaso soy una señorita? — pregunté devolviendo mis piernas a su lugar de origen antes de que Stile las quitara. — Y pues, está muy lejos.

Hice ademán de querer tomar la escoba que estaba a centímetros de mi pero no pude tomarla así que me desplomé de nuevo en el sillón jugando con mi celular. La puerta de la entrada se abrió haciendo sonar la campana que colgaba sobre esta, y Ryan entro, se estaba acomodando el cabello el cuál lo tenía muy despeinado; su respiración era agitada y su camisa estaba desabrochada de los últimos botones.

— Llegas tarde, Hollancito. — exclamé parándome de un salto de mi asiento.

Me dirigí hacía él y sostuve el dulce en mi boca mientras le abrochaba los botones de la camisa uno por uno, en otras circunstancias este momento se malinterpretaría de una forma que solo mi cabeza puede imaginar, pero ahora solo era una amiga que quería "ayudar".

— Me quede dormido. — se excusó.

— Claro. — dije riendo poniendo mis manos sobre su pecho. — Tu bragueta está abierta.

Su hermano soltó una carcajada y lo miro.

Su hermano soltó una carcajada y lo miro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Eres un idiota. — susurró este tendiéndole su mandil. — Levanta tu trasero de allí y ayuda, Julieta.

Resoplé y guardé el celular en mi pantalón, caminé hacía mi mejor amigo con paso cansado y tomé el mandil, me lo amarré a la cintura y me hice una coleta alta.

— Ahora si, a trabajar, señores.

**********

Ya habían pasado tres horas como mucho y el lugar si bien no estaba abarrotado de gente nos daba mucho que hacer por un tiempo. Un chico un tanto misterioso llego y se sentó en una de las mesas más cercanas a la cocina, Stile me gritó que lo fuera a atender y yo obedecí.

El chico era joven e interesante, llevaba un libro en la mano, un clásico "orgullo y prejuicio", traía puesto también un gorro de lana y unas gafas de sol.

— Buenos días, bienvenido ¿Espera a alguien más? — pregunté mirándolo con el lapicero en mi mano lista para escribir. Él solo negó muy apáticamente. — Tal vez a su buen humor.

— Ahora así tratan a los clientes, Allison.

El chico se quitó los lentes con este comentario y dejo ver sus ojos azules, de esos que parecen grises a simple vista; mostró un sonrisa amigable mientras yo gritaba y lo abrazaba.

Chicas Vs Chicos // COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora