Décimo Noveno Vitae

244 14 1
                                    


Ya habían pasado cuatro años.

Eren había terminado la universidad y ahora trabajaba para Hanji, tal vez no ganaba demasiado pero sí lo suficiente.

Levi ahora se enfermaba un poco más seguido, cosa que preocupaba a todos, pero no era nada grave... o eso creían.

Hanji se había quedado a vivir en la casa de a lado, creyó que era necesario.

Lili y Adisa visitaban de vez en cuando a la feliz pareja.

Lamentablemente, Carla y Grisha habían muerto dos años atrás en un accidente automovilístico.

Y Kushel... Ella no había aparecido.

Ese día destejaban el cumpleaños 25 del castaño, el azabache tenía 22 y su hijo 4.

-¡Feliz cumpleaños!-gritaron todos al ver como entraba el castaño.

-G-gracias-dijo felizmente pero con cierta vergüenza al ver tanta gente reunida, sus amigos de la escuela habían ido.

-¡Eren! Ya vente que el pastel no se partirá solo-dijo un castaño cenizo.

-Uhhh, pastel-dijo una castaña mientras se le hacía agua la boca.

-¡Ay Sasha! Tú siempre pensando en comida-dijo un calvo.

-Ya, ya tranquilícense-dijo un rubio.

-Déjalos, Armin, ellos son así-dijo un pecoso.

-¿El cumpleaños de papi?-preguntó un pequeño.

-Que viejo estás ya, Erensito-dijo una castaña con lentes.

-Siento como si hubiera sido ayer que lo conocí-dijo una pelirroja.

-Parece feliz-dijo una rubia.

-Y lo somos-respondió un azabache.

-Enserio, muchas gracias, chicos-dijo con una sonrisa mientras lloraba de felicidad.

ლ(|||⌒εー|||)ლ

-Levi~-llamó un castaño, coqueteando con su pareja-¿Ves estas imágenes?

-¿Qué tienen?-preguntó confundido el azabache.

-Muy pronto estarás así~ Creo que es hora de darle un hermanito a Lery.

El azabache se sonroja un poco, la verdad no lo habían hecho en mucho tiempo por temor a volver a quedar embarazado.

-¿Y si se vuelven a complicar las cosas?-pregunta asustado-¿Y si vuelve a morir?

En él aún estaba presente el recuerdo del hijo que tuvo con el rubio, tal vez no deseaba conocerlo pero muy en el fondo lo quería, aunque murió.

-No pienses así-respondió el castaño mientras lo abrazaba-Mientras yo esté aquí, nada malo pasará.

Ambos se voltearon a ver y se besaron, una entrega de amor mutuo frente a su único hijo.

ლ(|||⌒εー|||)ლ

Habían pasado unos días desde aquello y ellos dos parecían conejos, unas verdaderas máquinas de amor.

Ese día, el azabache despertó realmente enfermo, por lo que su médico en casa decidió atenderlo.

-Tu enfermedad ha regresado-dijo mientras ponía una toalla mojada en la frente del azabache.

-¿Mami está enfermo?-preguntó el pequeño mientras se acostaba junto al azabache, quien lo abrazó.

-Sí, pero estará bien-dice el castaño mientras se levantaba-Tengo que ir a trabajar, por favor Lery cuida a tu mami.

-A la orden-dijo mientras se acurrucaba en el pecho contrario.

-Los dejo, regreso al rato-le da un beso a su esposo e hijo para después salir a su trabajo.


"Ojos inocentes "TERMINADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora