Capítulo 13 -Tengo Miedo

6.5K 649 484
                                    

-¿Sabes algo? -Pregunté.

-No.

-El infierno puede ser divertido si estás con el demonio correcto.

No lo estaba viendo, pero puedo jurar de que estaba llorando, sentía como su pecho subía y bajaba rápidamente mientras su respiración se entrecortaba.

-No llores. -Pase mi mano por su cabello rizado.

-No estoy llorando. -Contestó aparentando no haber llorado en ningún momento.

-No te estaba viendo, pero sé que estabas llorando. -Me separé de sus brazos y quedamos frente a frente.

Coloqué mi mano derecha en su mejilla izquierda y acaricié su mentón. Él se quedaba inmóvil ante mis movimientos pero parecía no incomodarle, sus ojos cafés con pequeños tonos verdes brillaban y su nariz se encontraba un tanto roja. Sonreí a medias y retiré mi mano de su mejilla lentamente.

-Abrazame de nuevo. -Bajó la mirada con sus ojos cristalizados.

Mi corazón comenzó a latir rápidamente mientras mi rostro reflejaba asombro ante lo dicho.

Él se encontraba sentado en el sillón con su mirada aún baja, dejando caer algunos de sus rizos en su frente.

Me paré al frente de él y le estreché mi mano haciendo que inmediatamente subiera la vista. Sin nada más que decir Shawn tomó mi mano.

-Levantate. -Ordené.

Se levantó del sofá aún con mi mano junto con la de él y me dirigió su mirada. Cerró sus ojos fuertemente arrugando su rostro y se aventó a mis brazos, estripandome fuertemente contra su pecho y recargando su cabeza en mi hombro dejando salir un leve suspiro.

-Perdoname -Habló dejando escapar un sollozo y apegandome más a su cuerpo.

Me quedé muda y parpadee varias veces tratando de no soltar ninguna lágrima.

Mi hombro empezó a sentirse húmedo, definitivamente eran lágrimas de Shawn.

-Te perdono. -Acaricié su espalda de arriba hacía abajo.

-Gracias.

Este Shawn es muy diferente al que conozco, nunca lo he visto pedir perdón, estar arrepentido, abrazar a alguien, o incluso ser cariñoso, el Shawn al que estoy acostumbrada a ver es frío, sin sentimientos, sin emociones y con un corazón sin vida.

-No agradezcas.

-Amber, tengo miedo. -Sollozó con su respiración agitada.

-¿Por qué tienes miedo?

-Tengo miedo de llegar a amar.

Mis pulmones se congelaron y mis cabellos se erizaron haciendo que sintiese una descarga eléctrica por todo mi cuerpo.

-El Shawn que conozco nunca tiene miedo.

-Pero ahora si tengo.

-No tengas miedo de amar, vertirás lágrimas con o sin él.

Narra Shawn.

Me siento completamente patético, yo no soy así, no sé porqué me estoy comportando de esta manera, pero ella me hace ser diferente.

Mi corazón está volviendo a latir de nuevo, y tengo miedo de ser herido de otra vez.

Tengo miedo de llegar a amar, soy un maldito cobarde.

Quisiera no sentir nada.

Pero aveces todos buscamos a alguien cuyos demonios se entiendan con los nuestros.

Es difícil revivir a un corazón muerto.

Esto es completamente estúpido, Amber nunca se va a fijar en mi, soy un asesino, ¿Quién se va a enamorar de un asesino?, aunque no sé si ella sea diferente.

¡Ja!, por favor Shawn, reacciona, deja de pensar esas idioteces.

Es absurdo, esto no va conmigo.

-Dime Shawn, ¿Desde hace cuanto no tienes nada con una chica? -Dijo aún aferrada entre mis brazos.

-Desde joven he sido un asesino, y siempre me he estado escondiendo de la maldita policia y de la sociedad, no he tenido relaciones desde hace muchos años.

Malditasea, ¿Por qué se siente tan bien estar abrazado a ella?

-¿Entonces eres virgen? -Rió por lo bajo.

-¿Crees que soy virgen? -Solté una carcajada.

-Dices que siempre te has escondido de la gente. -Se separó de mis brazos dejando un espacio pequeño de distancia.

-Que no tenga novia no significa que no pueda tener sexo. -Saqué un cigarrillo de la cajetilla y lo prendí con un encendedor que andaba en mi bolsillo.

-¿Entonces cómo tienes sexo?

-¿Tan inocente eres? -Reí dándole un jalón a mi cigarro- pagaba por putas. -Tiré el humo por mi boca.

-¿Putas?, que asco. -Hizo un mohín.

-Tengo necesidades.

-Lo sé, pero al menos ten sexo con alguien decente. -Frunció el seño.

-¿Y tú eres? -Reí.

-Cómo sea, ¿Y desde hace cuánto tiempo no tienes sexo?

-¿Te debería de importar? Son cosas privadas-Alcé una ceja.

-Sólo es una pregunta. -Rió burlona.

-Ahg, esta bien te diré -Hice una pausa- desde hace dos días.

-¡¿Qué?! -Abrió sus ojos como plato y alzó sus dos cejas.

-Nah bromeo, desde hace un año o más supongo, no he vuelto a pagar por putas, prefiero pajearme por mi propia cuenta.

-Mucho mejor. -Sonrió con falsedad.

-¿Por qué te importa tanto con quién folle o no?

-Por nada.

-Tú no me engañas. Te enloquezco muñeca. -Le tiré un beso en el aire y al mismo tiempo guiñé mi ojo.

-Buen chiste, Shawn. -Rió sarcásticamente.

-Ya veo que es imposible dejar de pelear.

-Lo sé, pero me gusta pelear contigo. -Respondió simple.

-Interesante.

(...)

Prendí el pequeño radio que tenía en mi habitación y me recosté sobre la cama cerrando mis ojos.

-Quiero hacer algo hoy. -Pensé en voz alta.

-Tal vez ir a la ciudad y asesinar a alguien, o quemar la casa de alguna persona, incluso asesinar a gente mientras se encuentran durmiendo. -Sonreí con malicia.

-Que comience la función. -Me levanté de la cama frotando mis manos rápidamente.

---------------------------------------------------------------------------------

30 votos y la sigo :3

Prisionera [Shawn Mendes]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora