capítulo treinta y ocho

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Siempre escribo del celular así que pueden haber errores ortográficos, si encuentran uno me avisan en los comentarios. Disfruten

Narra Elijah

Era difícil ver a tu hija y a la mujer que amas y no poder tocarlas, que todas las personas que amaba, incluso mi hermano, se hayan ido. Él lo hizo por su bien pero duele no tener a nadie a mi lado. Sólo a Darren, nuestro mejor amigo. Esteban y Estela, nuestros otros amigos están viviendo en Argentina, Aleksei planea mudarse allá y eso rompe más mi corazón, mi hija va a estar demasiado lejos pero se que es por su bien.

Mis papás han estado algo apartados de mi. Más mi mamá que es una mujer rencorosa. Espero que no sepa nada de mi hija, si le llega a pasar algo me muero. Dixon, Dix no volvió a aparecer, lo extraño todos los días, lo lloro, veo su ropita, esa ropita que me había dejado con su olor a bebé y perfume impregnados, las fotos e inclusive su cordón umbilical, lo había guardado como conmemoración a su nacimiento. Quería y exigía al menos saber dónde estaba mi hijo. Necesitaba saberlo. También donde está Daniel, mi sobrino.

Claramente alguien tuvo que ver con sus desapariciones y tengo una sospecha de ello. Ahora me doy cuenta y veo lo que no vi.

Levantó el teléfono inalámbrico y llamo a Dariya. Luego de 7 intentos ella contesta con una voz cortada. Había estado llorando al igual que yo. Hoy nuestro hijo cumplía un día más de vida.

-hola- suspiro

-necesito tu ayuda, creo que se donde comenzar a buscar a nuestro hijo -ella comenzó a sollozar

-¿Me hablas enserio?- asiento y al saber que no puede verme digo un corto si.

Luego de acordar que nos veríamos en la cabaña y que lleve sus computadoras para nada rastiables cortamos. Tomo el primer vuelo a Rusia en zona turista. No quería manejar un avión en este momento. Mucho menos sólo ya que Darren la estaba pasando bomba con alguna chica en una playa de Cancún.

Al llegar me tomo un taxi y le doy la dirección. Me deja en una casa al comienzo del bosque. Siempre finjo que es mía, claramente no le iba a dar a nadie la dirección real. Camino con la maleta en la mano y encuentro la puerta bajo tierra. Entró allí y un túnel me conduce hacia el centro del bosque. Al salir camino un poco más y veo la cabaña. Era un camino largo como verán. 40 minutos caminando.

Al entrar noto que Dariya no había llegado. Espero y espero hasta que pasaron tres días, no sabía nada de ella y comencé a preocuparme. Ella no me dejaría plantado.

Agarró el teléfono que ella me había dado hace años que era super imposible de rastrear ya que ella lo diseño y la llamo.

Me atiende enseguida.

-por fin me llamas- dice ella.- tenemos un problema

-sabia que no me habías dejado plantado a propósito.

-cuando se trata de mi hijo no me importa nada. Claro que no te iba a dejar plantado. Lo que te tengo que decir es grave

-¿qué pasa?-me asusto.- ¿te hicieron algo?

-mis papás ya lo saben. Saben de Dixon. Y no sólo ellos. Los españoles también. Creo que tienen algo que ver con su desaparición. Mis papás hackearon la información de ellos y encontraron archivos nuestros con un bebé. Com Dix. Ellos seguían nuestros pasos. Estoy segura de que ellos lo tienen.- estaba cabreado. Mis sospechas habían sido ciertas. Los malditos Españoles buscaban hacernos la vida imposible. Querían a toda costa tener poder. Pero no entendía porque lo secuestraron, no pidieron un rescate, ni siquiera nos delataron- ¿estas ahí?- me saca de mis pensamientos.

MARCADOS POR SANGRE #2 [Completa Y En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora