Capítulo 13. Cada oveja con su pareja.

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Esta además de ser una fulana mentirosa; psicótica, en cuanto salga, a ver de a cuanto nos toca, eso no lo puedo dejar pasar; retiro lo dicho, yo no soy agresiva ni mucho menos violenta; la cabrita debería arreglar ese asunto antes que pase a mayores, sé y ustedes están de testigos que nunca he pasado por la mente de Braulio como una mujer que le pueda gustar; más bien soy insignificante para él.

-Estaba haciendo su trabajo.

¡Gracias cabrita!

-La tienes muy bien amaestrada.

Mira rubia de bote, que no soy perro, no te voy a permitir que hables de mí de esa manera, si no supiera que esto no va a acabar bien; entraba y barría contigo el piso o de perdis te quitaba las extensiones; bueno puede que no trajeras extensiones, pero igual te las arrancaba.

-No puedes insultar a las personas por estar haciendo su trabajo, además no sé porque estás haciéndome perder el tiempo con esta conversación.

¡Cabrita eres mi héroe!

-Esa tía no quería que pasara ¿Ya sabía de mí?

Claro que sabía de ti, pero no te había visto en vivo y en directo, la cabra no me había contado su triste historia contigo, si es a lo que te refieres, él no habla con nadie y menos conmigo.

-No te creas tan importante, tu tiempo ya pasó.

¡Ujule! Eso hasta a mí me dolió.

-¿Cómo puedes decir eso? Tú sigues siendo importante para mí.

Aquí si ya empezó el llanto, la rubita tiene los ojos anegados en lágrimas, se vino el drama, se vino el drama.

¡Pásenle un paquete de pañuelos por favor!

¡Nos va a inundar el hotel!

Yo me voy acomodando porque esto se pone bueno, lo estoy viendo casi en primera fila.

-Ahórrate tus palabras y también tu llanto, de seguro hay otros hombres que serán más importantes que yo.

-Braulio cariño, tu eres lo mejor que me ha pasado en la vida.

¡Ya esto parece un guion de telenovela!

-Lo mejor es que regreses por donde viniste.

-Solo te pido una oportunidad.

-Ya te dije que no.

La rubita no ha parado de llorar, pero aun así su maquillaje en general y en especial el de ojos no sé le ha corrido, yo ya tuviera unas manchas de mapache, algo así como un zombi o como uno de los integrantes del video de Michael Jackson, el de Thriller. Mi economía no da para más.

-Me voy a quedar en el hotel, Agustina dispuso una habitación para mí.

Esto lo dice entre sollozos, no sé de dónde le sale tanta lágrima a la rubita, se le van a secar los ojos.

Agustina está pensando que su hijo se reconciliará con la rubita, que tendrán una docena de críos y vivirán felices y comerán perdices por siempre, pero no, está no es la novela o el culebrón como dicen en España que estamos contando, aquí en esta no son felices, de momento; no sé qué pueda pasar más adelante.

-Si mamá te dispuso una habitación, no tengo inconvenientes, solo te pido que no me molestes.

¡Sandra amiga!

¡Te voy a tener que apoyar en esta!

A ver qué siente la cabra al ser acosado todo el tiempo; karma eres sabio, no esperaba menos de ti; ahora vamos a ver cómo te va cabrita, todo lo que das recibes, es de ley.

Enamórate y verásDonde viven las historias. Descúbrelo ahora