Elliot.
Por la ventana del cuarto de Nathan llega a verse la nieve que empieza a caer de a poco.
Ambos estamos acurrucados por el frío y quizás porque estamos desnudo y nos encanta sentir el cuerpo del otro. Él aún duerme.
Estos son de mis momentos favoritos con Nathan, donde él todavía duerme y yo, que me suelo levantar más temprano, tengo la oportunidad de verlo dormir y escuchar los latidos de su corazón al igual que su tranquila respiración.
¿En qué momento me enamoré tanto de él?
A penas llegamos a casa me desahogué de todo lo que venía guardando en el día; de la supuesta historia verdadera que me ha contado mi madre, de lo sucedido con William e incluso le conté que me arreglé con Jackson, lo que no le hizo mucha gracia pero se alegró por mí.
La nieve sigue cayendo, pasan las horas y todo sigue igual de tranquilo. Hoy es vísperas de año nuevo, vísperas del cumpleaños de Nathan.
Sabía que mañana es su cumpleaños, creo que él piensa que lo he olvidado ya que no me ha dicho nada ni hemos hablado del tema. Y la verdad es que no he preparado ningún regalo, estuve un mes entero dándole vueltas a qué puede gustarle a Nathan. ¿Qué se le regala a alguien que ya lo tiene todo?
A pesar de haber tardado semanas en pensar el regalo perfecto, cuando ya me había rendido y aceptado que no iba a regalarle nada, había comprado algo a último momento. Aún no estaba seguro del regalo que había comprado pero ya lo tenía bien oculto en mi armario por lo que se lo daría tarde o temprano.
Nat se remueve y se da la vuelta dándome la espalda. Observo su piel y lo acaricio, es suave y lisa; cuando se mueve se le marcan algunos músculos.
Aparto la sabana para verlo por completo, sus hombros, su espalda, sus nalgas... algo llama mi atención entre tanta piel pálida, en su espalda baja veo un... ¿tatuaje?
¿¡Un tatuaje!?
¿Cómo es que recién lo veo? Debe de ser reciente...
Paso mis dedos por allí, probando que no sea tinta común, pero mis dedos pasan una y otra vez y no se borra. Está grabado en su piel.
Me acerco para comprender lo que es.
¡Una E color azul!
¿Una E?
Me quedo pensativo, ¿y si tuvo otra pareja durante su viaje de la que no me ha contado?
E... ¿Erika? ¿Evan? ¿Ethan? ¿E...
—Elliot... —Escucho que murmura el modelo, me vuelvo rápido a mi lugar como si nada hubiera pasado.
¿Por qué no me contaría acerca del tatuaje?
Se da la vuelta y me mira con su cara de dormido. Muero internamente de la ternura al verlo.
—¿Te he despertado? —Digo rogando por no sonar nervioso, en mi mente no dejo de darle vueltas al tatuaje.
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White.
Romance¿Cuánto puede durar la felicidad? Nathan y Elliot se adentran en nuevos problemas en su relación. Tantas trabas en su amor parecen afectar su búsqueda: un verdadero felices para siempre. 《2do libro de la Saga Rainbow》