10 - Querido amigo

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Esto si que dará un buen giro a la historia!!! Adelante, lee.

***

Ahí estaba, una vez más frente a la casa de Alizee. ¿Cuándo dejaría de hacerlo? ni siquiera sabía por qué lo hacía. Esto no era lo mío, no era mi estilo, no era yo. Esta chica sacaba lo "mejor" de mí. No era ni quería ser eso, pero sentía una fuerte atracción hacia ella, hacia su aroma, hacia su persona... muy difícil de apartar de mí.

Después de terminar el cigarrillo me dispuse a salir del auto y caminar tranquilamente hacia su casa, sabía que Levesque no estaba porque tenía asuntos que arreglar al igual que yo, con suerte no regresaría hasta mañana por la mañana. No había nadie a mí alrededor, como siempre.

La noche era fría pero no demasiado como para congelarse. Entré por la ventana, era poco más de media noche, sabía que estaba dormida, lo presentía. Todo estaba como siempre, las pequeñas fotografías colgadas en la pared, la típica cocina en donde todo estaba perfectamente acomodado; en mi caso era igual, me agradaba lo ordenado. La televisión frente al sofá, las escaleras que daban al piso de arriba —por suerte no rechinaban—. Subí sin ninguna prisa hasta llegar a la habitación de Alizee, mientras lo hacía, evalué cada cosa que se encontraba a mí al rededor, pero nada me importaba más que estar dentro de su habitación.

Si por alguna extraña razón llegaba a descubrirme habría tenido que mentir, tal vez le habría dicho que habían reportado un asalto y que por disposición oficial había ingresado a su casa. Sonaba patético, pero lo haría si no me quedara otra alternativa. Ahora estaba frente a su habitación, tomé la manija y la giré cuidadosamente. Cerré la puerta tras de mí. La chica estaba postrada sobre su cama, parecía disfrutar de un buen encuentro con Morfeo, se veía tan tranquila y... apacible.

Caminé hasta la ventana, observé hacia donde se suponía debía estar mi auto pero no logré visualizarlo, eso indicaba que era buen lugar para pasar desapercibido. Fui hacia donde ella se encontraba y la observé con fascinación, debía parecer un idiota al imaginar mi cara tras contemplarla, pero no podía evitarlo.

—¿Qué me has hecho? —susurré acercándome a ella. Me situé a su altura, la tenía frente a mí. Ella se movió un poco, aunque no lo suficiente como para alarmarse, no sabía que estaba aquí. Más bien parecía que me encontraba en una historia en donde no podría ser descubierto porque era el protagonista, y en donde ella no podría despertar porque mi objetivo era contemplarla sin interrupciones. Sonreí al imaginar lo que podría ser—. ¿Te das cuenta de lo mucho que me hirió saber que tú y él se van a casar?

Dije esto en voz alta, más para mí que para ella, no quería decírselo, pero era algo que no había podido dejar de pensar desde aquella noche en la cena. No sabía si estaba bien sentirme perdió, lastimado, herido o cualquier otro jodido sentimiento que fuera ese, pero nunca lo había poseído. Nunca había experimentado ese tipo de afecto hacia alguien, más bien, era aprecio. Los admiraba y los quería en mi vida, justo como a Nolan. Pero con Alizee, con ella era algo muy distinto. Quería desaparecer a Masen, sabía que podía, pero no ahora. No con ella en mi mente.

—¿Alex? —susurró en sueños trayéndome de nuevo a la realidad. No me moví, no hice nada. Me había quedado estático sin poder mover un músculo. El tiempo parecía no avanzar, pero no ocurrió nada más. Volvió a los brazos de Morfeo sin percatarse de la presencia de un extraño. Por un momento llegué a creer que despertaría y después de un tiempo, cuando estuve seguro de que no despertaría, le acaricié la mejilla.

BUENAS NOCHES QUERIDA #1 (Serie Caden)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora