Not Like The Movies → j.b → Spanish Version

Capítulo 16

Justin.

—Aquí tienes tu chaqueta —dijo Katie una vez que llegamos a su casa.

—Oh, sí, gracias.

Estaba pasando un mal rato con las palabras ahora. Sentía que me habían arrancado el corazón después de todo lo que hicimos hoy, Katie nunca me dijo que podía besarla.

—No, Justin, gracias por todo. —Continuó y entonces me abrazó.

—No lo menciones —susurré, esperando que no lo hiciera.

Esto no fue ningún éxito. Me esforcé tanto en hacerlo todo perfecto y aún así no se enamoró de mí.

—Buenas noches —dijo mientras entraba a la casa.

—Buenas noches, Katie —respondí tan pronto como la puerta se cerró con un clic.

Caminé hacia la casa de Christian con la cabeza baja y las manos en los bolsillos. ¿Demasiado?

—Oh, hola, Justin —saludó la señora Beadles cuando entré por la puerta principal—. Llamó Scooter.

—¿Qué quería? —Mantuve la compostura para que ella no comenzase a preguntar.

—Quería decirte algo acerca de estar listo para irte en cuatro días. No lo sé, pidió específicamente que lo llamaras tú.

—Gracias.

Ella asintió y salió de la habitación y entró a la cocina con Caitlin. Subí corriendo las escaleras el momento en que la vi. Tan pronto como estuve en el dormitorio de Christian me recosté de la puerta y me deslicé hasta el suelo. De inmediato enterré mi rostro en mis manos.

—Amigo, ¿estás bien? —Oí decir la voz de Christian.

—¡Christian! —dije poniéndome de pie, alarmado—. No tenía ni idea de que estabas aquí.

—Bueno, es mi cuarto. —Se rió, pero después volvió a estar triste.

—Me enteré de lo tuyo con Lily.

—Ni siquiera me importa —me dijo—. Era claro que ella estaba mintiendo. Sé que solo está interesada en los chicos malos y populares.

—Bueno, no te sientas mal. —Suspiré sentándome—. Katie nunca me dijo que podía besarla, y ni una vez me dijo que sentía nada por mí.

—Hombre, lo siento mucho —dijo. sorprendido.

—No te preocupes por eso. Ella ha avanzado... y quizás esto es una señal para que haga lo mismo.

—¿Qué quieres decir?

—Quiero decir, necesito obligarme a superarla.

Se me ocurrió una idea, saqué mi teléfono y de inmediato marqué el número que aún tenía memorizado.

—Hola, nena —dije al teléfono—. No debí haber sido tan duro contigo. Fui un completo idiota y mereces algo mejor. Por favor acéptame de regreso.

—¿Justin? —Sonó la voz de Selena por el teléfono—. Debo admitir que me sorprende bastante que llamaras.

—S... Sí, lo sé.

—En realidad me molestaste la otra noche.

—Perdón por todo... y tienes razón acerca de... bueno, tú sabes.

Ella suspiró y entonces hizo una pausa. Grandioso. Ni Selena quería volver con...

—De acuerdo —accedió.