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Frustración.

Esa era la palabra que había rondado por mi cabeza la última semana, tomó una almohada y la coloco sobre mi rostro. Los gritos no cesan, quizás disminuyen un poco, papá y Hilary han estado discutiendo constantemente, lo peor es que sus gritos asustan a Jazmín y yo tengo que salir a su rescate, sacarla de casa y regresar cuando ya las aguas se han "calmado".

Más gritos, me levanto al escuchar algo romperse, un vidrio podría jurar, calzó rápidamente mis pies y salgo de la habitación en busca de mi hermanita, otro objeto es estrellado. Entro a la habitación de Jazmín sin siquiera tocar la puerta, la veo encima de la cama hecha un ovillo.

— Ya estoy aquí — susurro tendiéndole la mano, ella la toma nerviosa.

Pobre niña.

Sostengo su mano y salimos por la puerta trasera de la casa, mientas los gritos y palabras ofensivas continúan dentro. Caminamos durante varios minutos, pienso en llamar a Marcus pero debe estar en clase, no sé si lo hace a drede pero última nunca está y por supuesto no tiene que escuchar las peleas y mucho menos hacerme cargo de la enana; odio tanto a Hilary y en parte a papá por no tener los huevos de mandarla al demonio, gracias a ellos no he podido ver a Ethan durante ésta semana, entre sus clases y mi trabajo –no trabajo, de niñera de mi hermana, no nos hemos podido ver.

Llegamos hasta el pequeño parque que queda a dos cuadras de nuestra casa, compro un helado a Jazmín, un niño la invita a jugar, me pregunta con la mirada y yo asiento en respuesta. Tomo asiento en un banco y observo a Jazmín jugar, mi teléfono suena informándome que tengo un nuevo mensaje.

De: Ethan😍😍😍❤️❤️
Hola muñeca, quiero verte hoy, ahora.., XD no aguanto las ganas de besarte.

Sonrío como estúpida al ver, inmediatamente tecleó mi respuesta. La sonrisa va desapareciendo conforme la realidad cae sobre mí como un balde de agua helada.

Para: Ethan😍😍😍❤️
También quiero verte pero no puedo, problemas en casa otra vez ... XD gracias por lo de muñeca.

A los segundos llega su respuesta.

De: Ethan😍😍😍❤️
No me importa, no acepto un "no" por respuesta, ¿ dónde estás?, tu príncipe Neoyorquino irá por ti... XD te he comprado un regalo.

Tecleó la respuesta.

Para: Ethan😍😍😍❤️
En el parque que está a dos cuadras de casa. ¿ qué me compraste?.

Bloqueó el móvil y vuelvo mi vista hacia Jazmín que continúa jugando, sonrío al ver lo feliz que es... Lejos de sus padres. Mi móvil vuelve a sonar.

De: Ethan 😍😍😍❤️
Okay, voy en quince... XD es una sorpresa.

Guardo el móvil sonriendo, la curiosidad me carcome pero las ganas de ver a Ethan son mayores, ni siquiera hemos podido volver a tener un momento a solas, sólo nuestro.

Quince minutos exacto veo el Audi de mí chico estacionarse en la acera, me quedo observando hasta que lo veo bajar del auto, lleva unos lentes de sol que lo hacen ver extremadamente sexy, al conjunto con unos jeans rotos, una ramera y su utópica chaqueta. Su mirada conecta con la mía, una línea fina se dibuja en sus labios al sonreír. Camina hasta mí y por Dios que fueron los segundos más largos de mi vida.

Sin saludos, nada de cortesía, llega hasta donde estoy, sonreí y posa sus manos en mis caderas atrayéndome hacia el, sin pedir permiso posa sus labios sobre los míos. Su aroma se mezcló con el mío, la descarada pero anelada introducción su lengua en la humedad de mi boca fue delirante, sus labios se movían sobre los míos con necesidad, necesidad que era recíproca.

Algo dentro de mi cerebro, a pesar del bloqueó que Ethan lograba en mi, me recordó que estábamos en un parque público, eso y el carraspeó de una anciana.

— Jóvenes, no saben contenerse— murmuró la anciana antes de alejarse de nosotros.

Tanto Ethan como yo reímos.

— ¿ Qué te parece si vamos al cine?— preguntó mi chico mientras arreglaba un mechón rebelde detrás de mi oído.

— mmm— me tomé unos segundos, Ethan elevó las cejas intrigado— sólo si me muestras ese regalo.

— Bien, si con eso ganaré un "si"— rebuscó algo en su bolsillo.

—¡ Tìo, Ethan!— Jazmín se abalanzó literalmente hacia Ethan, quien la sostuvo en brazos sonriendo.

Vale, a mí nunca me saludado así.

—¿ Y bien?—. Pregunte devolviéndolo a nuestro asunto, mi curiosidad estaba a cien.

Dejó la niña en el suelo para volver las manos a sus bolsillos, tanto Jazmín como yo observábamos atentamente.

— Cierra los ojos— ordenó, obedecí.

— Listo.

Abrí los ojos, abrí y cerré la boca varías veces, en mis manos habían dos colgantes, hermosos, sonreí presa de la emoción.

— Esto no representa ni la más mínima demostración de mis sentimentales hacia ti, date la vuelta — colocó el colgante, lo toque y creo que me enamoré más de él si eso era posible. Le coloqué el suyo.

— Te amo— susurré antes de darle un pequeño beso.



A pesar de mis quejas terminamos comprando boletas para una película infantil, pues a Jazmín no le gustaron ninguna de la de adultos y Ethan por supuesto la apoyo, observé la fila que había frente nosotros, joder para comer palomitas y beber refresco si que había que esperar.

Por fin llegó nuestro turno, ordenamos. Después de que nos atendiéramos tómanos el camino hacia la sala en donde veríamos la película, nuestros pasos se detuvieron al escuchar a alguien llamar a Ethan.

— ¿ Ethan?—. Voltee a ver, frente a nosotros había una chica alta, de ojos claros, cuerpo hermoso y pelo, joder que pelo.

La chica dió un paso hacia nosotros y después de eso todo me pareció irreal, murmuró un "Eres tú " y luego su boca se estampó en la de Ethan...

YO: SOY LA GORDA ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora