Instante

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Por un instante, todo parecía embonar.
Ella. Él. Bajo el mismo cielo azul, en un prado pintado de amarillos y naranjas en el último día del año.

Los sonidos eran hipnóticos; a pesar de ser una urbe tan congestionada, había un espacio de paz, antes de él, ahora de ambos.

Crujidos, risas, crujidos, besos.
Un patrón constante.

Ella tan clara, el tan oscuro. Egoístas, en equilibrio perfecto. Veían luz en la oscuridad, sombras en la luz: "Perfección" le llamaban.

Tiempo, necesidades, problemas. Todo era lejano.
Amor, caricias, lo nuevo.
Todo tan cercano.

Lugares ajenos se volvían propios, aprendían, renacían.

Por un instante todo parecía embonar.
En un instante vieron todo el día volar.
Ellos fueron un instante y eternidad.

Poesías sin nombreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora