-Alex... ¿Q... Que has hecho?- Preguntó Brink, estaba en el suelo, se había caido de la sorpresa, no lo culpaba lo unico que me habia mantenido de pie era que habia encontrado una pared detras de mi justo antes de perder el equilibrio, un espectaculo de luces violetas decoraba las ruinas de las estructuras que se erigian ante nosotros.
-¿Una civilizacion alienigena?- Preguntó Shannon.
-Creo que sería mas correcto decir que es una civilización nativa de Eden- Respondí.
-Eso aun no lo sabemos- Dijo Brink mientras se ponía de pie.
-Si era de una raza extranjera... ¿Qué les hizo esto?-
-Mas nos vale averiguarlo- Me dijo Chris apresurandose a explorar las ruinas. Lo seguí corriendo y detras de mi todos los demas.
La arquitectura de los edificios era similar a la usada por el imperio romano de la tierra, pero estos habían sido construidos con materiales que desconocíamos, ademas la constante presencia de luces violetas recorriendolos nos llevaban a pensar que conducían muy bien la energia. El interior de los primeros lugares que visitamos estaba vacío, como si hubiera sido abandonado con tiempo de sobra, o a proposito.-Su tecnología parece ser mucho mas avanzada que la nuestra, creo que necesitamos a Lex para que analice esto- Dijo Brink.
-Lex esta a dias de aquí, su señal no llega tan lejos- Respondió Andreas.
-Aun- Acotó Chris, todos lo observaron, al ver dedicadamente su mochila comprendí lo que ellos dos habían planeado y sonreí.
-Van a instalar una antena, ¿Verdad?- Brink me sonrió y asintió.
-Es correcto, Chris lo sugirió y entre él, Lex y yo, comenzamos a trabajar en un transmisor y receptor de señal lo suficientemente liviano como para traerlo, y lo suficientemente potente para que su señal llegue desde Hope-
-¿Llegará?-
-Solo si lo instalamos en la copa de Tamarisco- Todos permanecieron en silencio, incluso Chris, él no sabía de esa parte del plan, era algo que Brink prefería guardarse para sí mismo, lo que significaba que no tenía intencion de que nadie que no fuera él escalara el árbol-
-No debemos ser muchos, con dos será suficiente, ¿No es asi Brink?-
-No Alex, tu no subes conmigo, es demasiado peligroso y los Elegidos te necesitan-
-Vamos- No me iba a dar la vuelta, si alguien se arriesgaba sería yo, y conociendo a Brink, no me dejaría ir solo, pero aunque no lo admitiera sabía que en el fondo quería que yo lo acompañara. Faith y Shannon intentaron detenerme, pero en vano, no podía ser demasiado peligroso, subiríamos por el interior, no por fuera. Retrocedimos hacia la entrada del árbol, la fiesta de luces y colores continuaba sin cesar y la gran cantidad de ramas interiores nos invitaban a unirnos a ella. Chris le pasó a Brink la mochila y estrechó nuestras manos deseandonos suerte.
-Si me caigo de cara entierrame boca abajo- Dije bromeando, Shannon me golpeó indicando su desacuerdo con mis chistes, sonreí y la abracé muy fuerte, luego besé a Faith y estreché la mano de Andreas.
-¿Cuánto crees que tardaré en subir?- Le pregunté.
-Mucho, digamos que subiras las escaleras mas largas del mundo, nuestros antepasados estarían orgullosos chico ascensor- Respondió riendo, tambien me reí y me di la vuelta para irme. Vik me seguía, sabía que nada en el mundo lo detendría y que él era mucho mas agil que yo, no se caería, pude escuchar un susurro en mi mente, la voz de niña de Shannon, no comprendía sus palabras, pero sabía que Ros me deseaba suerte.
Los insectos luminosos comenzaron a rodearnos, a iluminar nuestros pies para que no dieramos pasos en falso, otra vez, todos ayudaban a todos, me preguntaba si intentarían sostenerme si me cayera.
-Oye Alex, tendrás que montar el transmisor por tu cuenta, no siento fuerza en mis manos, prometo ayudarte con todo lo que pueda-
-No te preocupes Brink, ya me has salvado la vida dando tus manos a cambio, es lo menos que puedo hacer-
-Gracias por venir, no quería pedirtelo pero sabía que accederías, temía venir solo-
-No habría forma de que vengas solo amigo, estamos en Eden, tenemos que ser un equipo, en todo-
Nos detuvimos a descansar cuatro veces, Vik se había dormido en mi hombro y al ver hacia abajo solo podiamos identificar un vacio interminable, los "escalones" se encontraban mas separados pero aun no lo suficiente como para que un paso en falso nos lanzara a una muerte segura. Aunque al pensar en lo cansados que estabamos, todo era posible.
Fuí el primero en caer, me sorprendía la voluntad de Brink, nada lo detenía, y a pesar de su respiración exhausta se mantenía de pie y con deseos de continuar, al menos así era hasta que vio mi rostro, no se que fue lo que presenció, pero sea lo que fuese lo hizo cambiar de opinion y sentarse sobre una de las ramas para tambien descansar.
-Alex no puedes continuar, vas a desmayarte- No respondí, aun intentaba recobrar el aliento, me esforcé al maximo para sonreír pero estaba demasiado cansado, luego me desmayé.
Cuando volví a despertarme podía ver luz diurna, froté mis ojos para comprobarlo pero allí estaba, a unas pocas centenas de metros se encontraba la copa de Tamarisco, ¿Cómo había llegado allí? Si cuando me desmayé aun faltaba demasiado, me volteé para ver donde se encontraba Brink y allí estaba. Ahora el se encontraba inconsciente, no me tomó demasiado comprender que intentó cargarme él mismo hasta lo mas alto, pero el cansancio había podido incluso con él. En verdad admiraba a ese hombre, era increible, y no importa que tanto me faltara descansar, ahora lo llevaría yo hasta la copa.
Poco tiempo tardé en darme cuenta de que esto era casi imposible, las ramas antes usadas como escalones se encontraban ahora aleatoriamente dispuestas por todas partes, y requería un gran esfuerzo mantener el equilibrio y cargar con un hombre a la vez, pero si él había hecho eso por mi yo lo haría por él.
Nunca nada me tomó tanto esfuerzo fisico, pero al fin lo logré, al pisar el ultimo escalón y luego entrar en una zona mucho mas amplia, llena de monstruosas ramas que miraban desde arriba a las nubes, me dejé caer y a Brink junto a mi, esta vez no me desmayé, Vik se había ido a trepar para buscar un lugar donde instalar la antena.
-Eres duro de roer Alex- Reí, eso significaba que Brink había despertado, se puso de pie y me extendió la mano para levantarme, una vez ambos estabamos de pie Vik volvió y nos indicó que lo siguieramos, eso hicimos, a duras penas y sosteniendonos el uno sobre el otro.
-¿Cuanto tiempo estuve desmayado?- Le pregunté.
-Unas pocas decenas de horas hasta que me desmayé yo, probablemente tambien haya durado lo mismo, si no fuera por el reloj habría perdido la noción del tiempo, pero en total hemos tardado treinta y dos horas- Era mas de lo que esperabamos, pero mejor que nada, no podiamos quejarnos. Llegamos a donde Vik nos esperaba y apartamos las hojas para ver el paisaje.
Di un salto hacia atrás y Brink soltó una carcajada, nos encontrabamos tan altos que se podía ver claramente la curvatura del planeta, luego de contemplar la belleza del mundo en el que viviamos un poco nos dedicamos a instalar el transmisor, Brink me guió paso a paso y al terminarlo lo encendimos. Comenzó a girar y buscar una señal, ojala la encontrará.
-¿Lex? Lex, ¿Me oyes?- Nada, solo interferencia, al cabo de unos segundos decidí preguntar de nuevo, pero un sonido diferente me interrumpió.
-¿Alex? Dios mio, ¡Lo lograron!- Nunca pensé que escuchar la voz de un robot me haría tan feliz, pero allí estaba, habíamos logrado contactarla -Me alegro de que la antena haya funcionado, permitanme...-Silencio otra vez, ni siquiera interferencia, Brink y yo preguntamos durante unos minutos, la antena seguía girando, la interferencia no había vuelto, ¿Que había pasado? Una voz nos hizo saltar del susto.
-¡No lo van a creer! Las vistas son increibles- Suspiré, coincidía con ella en eso.
-¿Cuantos kilometros puedes ver?- Preguntó Brink
-¿Kilometros? Brink... Puedo ver todo Eden- Se sorprendió al oir eso, yo solo me puse aun mas euforico. Presioné el boton de mi reloj para comunicarme con ella y pude comprobar que funcionaba.
-Oye Lex, vamos a bajar del árbol, tengo algo que mostrarte-
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Eden
Science FictionAño 2042, la sobrepoblación llevó a la escacez de todos los recursos naturales indispensables para la vida, en un ultimo esfuerzo por salvar a la especie, todas las naciones del mundo se unieron para llevar a cabo el Proyecto Eden. Prohibida la copi...