Half » JaeYong; NCT

VI

─ Por lo que ví, te agradaron los chicos. Tanto que incluso jugasté con ellos y me disté un susto de muerte. En verdad creí que Johnny te mataría. ─ el castaño apretó el volante debido a los nervios experimentados, pero no aparto los ojos de la carretera en ningún momento.

─ Fue algo incomodo al principio, pero luego conseguí llevarme bien con todos, en especial con Mark. ─ TaeYong apoyó la cabeza en el respaldar del asiento y volteó a ver a JaeHyun, aprovechando que éste no podía verlo. ─ Y me ofende que hayas pensado que podía ser capáz de hacerle algo a él. Al único al que mataría es a ti. ─ sonrió de forma sincera.

─ ¿Gracias? ─ hizo una mueca mientras giraban en una curva.

─ ¿Iremos a ese lugar al que me prometisté ir? ─ sacó el tema TaeYong, para evitar silencios incomodos y que JaeHyun siguiera pensando que era por completo amargado que no era capáz de mantener una conversación sin enfadarse.

─ No es tan increible como piensas, y me sorprende que lo recuerdes...

El híbrido se cruzó de brazos y miro hacía la ventana con desinterés, pensando en que responderle para no sonar interesado en el tema. Llevó una mano a su cuello, rascándolo con gesto nervioso antes de hablar. ─ Bueno, me resulta extraño que hayas decidido llevarme a algún lugar, teniendo en cuenta que ambos somos amigos demasiado cercanos y que se conocen desde mucho tiempo. ─ fingió carraspear la garganta.

─ No sé trata de ser amigos o no, quiero conocerte. ─ hizo una pausa. ─ Y para ello no creo que sirva de mucho quedarse en casa, debemos salir. ─ la boca de TaeYong literalmente se encontraba entreabierta, sus ojos denotando sorpresa en todo su esplendor.

Rápidamente se enderezó en su asiento, cruzando los brazos sobre su pecho y luchando porque las palabras no le salieran en tartamudeos estúpidos y tímidos, además de que su rostro debía delatarlo descaradamente en su vergüenza.

─ E-Eso signfica qué... ─ la suave y tranquila voz de JaeHyun lo interrumpió.

─ Te quedas conmigo. ─ por un segundo, pensó que talvez sonaba más alegre de lo que debería. ─ No hay un tiempo determinado para ello, así que ambos tendremos que adaptarnos a vivir juntos, ¿bien?

─ B-Bien. ─ su voz salió en un murmullo ahogado, abrumado por todas las sensaciones que en ese momento estaba sintiendo, y que no había experimentado desde que había llegado a la casa de aquél humano. No sabía en lo absoluto como sentirse, ¿felíz? ¿decepcionado? ¿con esperanzas de poder tener un hogar de nuevo? Bien, esa última en definitiva debía ser descartada. TaeYong no iba a encariñarse verdaderamente con nadie nunca más, no quería sufrir de nuevo.

No más.

─ ¿Debo tomarme tu silencio como un 'no me agrada en absoluto la idea'? ─ salió de su burbuja para sacudir la cabeza.

─ ¿Me creerias si te dijera que no se en absoluto que responder a eso? ─ y por primera vez desde que se había topado con JaeHyun, fue verdaderamente sincero. ─ Haré mi mejor esfuerzo. ─ dijo al final, con un suspiro.

─  Ambos lo haremos. ─ corrigió, y por un segundo pensó que los dos estaban siendo igual de ridículos al fingir detestarse de esa forma.