Mr. Bunny Killer 《KookMin》

#22

Pov Jimin:

—Eso, te demostraré lo placentero del sexo, haré que conozcas cada parte erógena de tu cuerpo y lo sensible que puedes llegar a ser, haré que tu mismo pidas por más mientras abres tus piernas para mi dejándome llegar hasta lo mas profundo de tu ser, permiteme pecar con tu cuerpo Park Jimin y al mismo tiempo tu pecarás con el mio.

Después de eso yo comencé a balbucear palabras sin sentido, no sé si me lo imaginé por el nerviosismo que sentía en ese momento o me pareció ver una sonrisa sincera en los labios de Jungkook, lo más posible es que lo imaginara.

 Ahora nos encontrábamos caminando por la calle como dos personas normales, claro, normal si no fuera por las miradas que atrae Jungkook, se que es guapo pero si ven que esta conmigo para que lo miran... momento eso sonó bastante mal...

—Jimin -escuché como me llamaba y voltee a mirarlo- es la quinta vez que te hablo, cuidado, quemarás tu cerebro si piensas tanto 

—No hace falta que digas eso... -bajé mi mirada avergonzado, realmente no era capaz de mirarlo a los ojos- so-sobre...lo que dijiste antes...

—Ven -antes de que pudiera seguir hablando me tomó del brazo literalmente arrastrándome a quien sabe donde-

Cuando por fin nos detuvimos un montón de luces frente a nuestros ojos iluminaron todo, era realmente bello, un parque de atracciones, recuerdo que quería venir aquí con mi novia pero por nuestros estudios nunca lo hicimos, además de que esté parque solo abría de noche por  lo que era bastante peligroso andar solos por las calles, pero ahora estoy aquí con Jungkook... quién lo diría... al menos sé que estaré seguro con el... odio este sentimiento de seguridad que estoy desarrollando cuando estoy junto a el... Jungkook es la última persona en quién debería confiar, pero es la única que tengo ahora.

No sé en que momento pero ahora nos encontrábamos recorriendo el parque, no sé exactamente porque Jungkook me trajo aquí, si a todos los lugares que íbamos yo lo terminaba arrastrando conmigo. Después de unos minutos comenzamos a caminar por los puestos de los juegos mas pequeños donde tu ganabas tu premio, habían peluches bastantes bonitos pero soy hombre, no hay manera de que me gusten esos peluches, habían bastantes hombres jugando para ganar alguna cosa para sus novias pero todos eran bastante malos con la puntería, yo también soy un fracaso en eso así que claramente si estuviera aquí con mi novia con suerte ganaría un diminuto llavero, de todas maneras nada me resultaba llamativo... bueno hasta que vi un enorme conejo rosa que admito se me hacia bastante parecido a Jungkook, me quede mirándolo completamente embobado, mierda, lo quería, pero no tenía dinero para comprar un turno ni mucho menos la puntería para botar todos los objetos pues para conseguirlo había que derribar todos los círculos que se movían mas rápido de lo que mi vista era capaz de captar.

—Un Jungkook de peluche... -susurré sin apartar la vista de aquella esponjosa criatura-

—Tanto me deseas que hasta un conejo de felpa te recuerda a mi -dijo esa voz ya bastante conocida para mi, no pude evitar asustarme al escucharlo tan cerca-

—N-no... solo es lindo... -susurré apenado- es tarde... tengo sueño

—¿Lo quieres? -preguntó ignorando por completo mis palabras-

—Tengo sueño... -dije mirando hacia otro lado, no quería mirar sus ojos, si los miraba me arrepentiría, si miraba sus ojos algo cambiaría, tengo miedo de eso-

—¿Lo quieres? -volvió a insistir ahora con una voz mas dura-

No me quedó más remedio que asentir y en menos de un segundo tenía a Jungkook arrastrándome hasta ese juego, pagó por un turno, el hombre del juego le entrego una pistola de juguete a la que Jungkook miró con cierto desagrado, creó que el quería usar la suya... aunque claro, nos llevarían arrestados a ambos, sería una manera ridícula de arrestar al asesino mas buscado del país, no pude evitar reír al pensar eso.

—Oye, kitten

—¿Ah? -lo miré confundido pero antes de decir algo más sentí sus labios estrellarse contra los míos, fue rápido, un beso fugaz que dejo una extraña sensación en mi-

—Para la buena suerte

Dicho eso me sonrió y comenzó a disparar dando en el centro a cada circulo, fue realmente muy rápido, lográndolo hacer en la primera oportunidad, sentí unos aplausos a nuestras espaldas pero los sentía tan lejanos... Jungkook me entregó el conejo de felpa que yo quería y me aferre a el, era casi del porte de la mitad de mi cuerpo incluso más grande. Durante el resto del camino no cruzamos palabra alguna, regresamos a su casa, más bien mansión, lo seguí obedientemente hasta la que ahora era mi habitación, una vez allí me senté en la cama aún sin soltar el conejo de felpa, Jungkook estuvo unos segundos observándome sin decir nada, yo no me atrevía a mirarlo.

—Eres tan lindo -dijo aquello mientras tomaba mi rostro entre sus manos haciendo que por fin nuestros ojos se encontrarán- solo mírame... mírame Jimin

Y lo hice... lo mire... y me perdí... perdí todo lo que era hasta ese momento... me perdí completamente en sus ojos, con solo una mirada suya perdí la razón.

—Hazlo...

—¿Eh? -me miró confundido-

—Qui-quiero hacerlo... esta vez yo quiero... -mis mejillas comenzaron a arder-

—Tu...

—¡Kookie!

Ambos volteamos hacia la puerta donde Taehyung, creo que se llamaba así, estaba de pié observándonos, Jungkook enseguida se alejo de mi para ir con el, pero yo tomé de su chaqueta deteniéndolo, el volteó a mirarme sin decir nada así que yo hable primero.

—No te vayas...

Mi voz apenas salía de mi boca, ni yo entendía lo que estaba haciendo.

—Después arreglamos esto -me dijo para después apartar mi mano de su chaqueta-

Seguido de eso Taehyung y él salieron, y yo quede solo junto con el conejo de felpa al cual me aferre con todas mis fuerzas, lloré, lloré más que cuando me secuestro, lloré más que aquellas noches recordando a mi familia, lloré más que cuando ese chico me violó, lloré aún más, lloré odiándome a mi mismo por el sentimiento que comenzaba a desarrollar por el mismo chico culpable de cada una de mis lágrimas, porque lo supe desde un principio, no debí mirar sus ojos, los ojos de un asesino ocultan muchas cosas... pero sus ojos también me llevaron a mi propia perdición...