Una ciudad que antes era normal
Unos científicos provocaron la catástrofe de la raza humana...
eso no importa, la pregunta es
¿Cómo es posible que un zombie se enamoré?
Dibujo by: Vilgax @XSanto_vilgaxowo
Portada by: Vilgax @XSanto_vilgaxowo
[¡Grac...
Diario del Dr.Flug-1 año después del apocalipsis total:
El tiempo realmente se fue como el agua, no me había dado cuenta que ya era un año desde que todo este embrollo comenzó, desde que conocí a Black Hat, a Demencia y el día en que mi rostro quedó destrozado, por culpa de mi difunto compañero de laboratorio.
Seguí investigando y experimentando al rededor de lo que avanzaban los meses, pero aún no podía recordar una sustancia perfecta para que lograra hacer una cura para toda esta enfermedad que no dejaba de enmanar y contaminar.
5.0.5 se encarga de cuidar de black Hat, quien ya se acostumbro rápido a ser tratado como una persona común, pero, hay veces que lo miro y el tiene problemas, a veces empieza a tambalear o empieza a temblar de una manera extraña, tanto, que prefiere alejarse y cuando se calma, regresa. Claramente no esta bien, días pasaron y yo lo vigilaba cada vez más cerca, me sorprende el hecho que no se haya dado cuenta.
Uno de esos días, lo seguí en sus rutinas en el bosque, el estaba apresurado, estaba harto, como si fuera a salirse del control total. Lo perdí entre una ventisca algo fuerte, haciendo que el logrará desaparecer entre todo el lugar en el que yo pisaba.
No dejaría que el estuviera solo una vez más, incluso ahora que presenta este tipo de problemas, el es alguien importante para mi, prácticamente, lo último que me queda y no pienso perderle.
Camine durante horas y horas y horas. Fui acosado por los escasos lobos que quedaban, fui perseguido por uno que otro zombie, pero me defendía arduamente con un machete que me había equipado antes de salir detrás de mi Black. Dejo de ser de día, llegando a un deprimido y frío ocaso, nunca cruzo en mi cabeza la idea de volver y dejar a Black solo, para nada, al contrario, no me iría del lugar sin el.
La temperatura comenzó a bajar, para mi suerte no la suficiente y a lo lejos lo vi, incado, su silueta varonil lograba que lo identificará en un santiamén. No estaba solo, veía a una mujer pero ella parecía estar inmóvil...espera, ¿qué?, el...nah, para nada, el no lo haría, ¿o sí?...
Me acerque lo suficiente, sin dejarme llevar por el momento, manteniendome cauteloso, hasta que mis ojos pudieron enfocar bien, con ayuda de la luna, que el estaba...¡el estaba comiendo a aquella mujer que estaba muerta...!.
No quise hacer ruido alguno, mirarlo tan desquiciado, tan hambriento de carne humana me hacía pensar en mis errores, en el porque no solucione todo. Tape mi boca para abstener un jadeo o un posible grito. Mierda, podía escuchar como el devoraba su carne, como la despedazaba, el ruido de sus extremidades separarse, podría jurar que no aguantaría oler el putrefacto olor que la ya difunta mujer esparcía.
Pasaron más o menos 2 horas y Black Hat había terminado, el estaba tranquilo, como si volviera en si, al ver la masacre que hizo, empezó a quejarse y llorar.
Black-No, no de nuevo, no una vez más, ¿por qué?, ¡¿POR QUÉ?!
No tolere más, salí para abrazar su espalda, tratando de calmarlo
Todo quedo en un desgarrador silencio, me senté en la nieve, recostándolo a el en mis piernas.
Flug-Yo tengo la culpa de esto
Black-¿Qué?
Flug-...-suspiro pesado- Hace un año...tenía a un compañero, llamado Nikolas, tu lo conociste, fuiste su amigo, tu eras un traficante de drogas poderoso y el acudía contigo para sus experimentos...el...el quería hacer una cura para toda enfermedad, pero el insistía en un medicamento con una droga llamada Flakka...altera las neuronas, activando con distintas sustancias, despertando un deseo insaciable de comer humanos, Black, tu fuiste su primera victima
Comencé a llorar, quitando mis googles y quitarme la bolsa de mi cabeza, haciendo que el, extrañamente se sorprendiera al ver mi ya cicatrizada herida y al momento de verlo a los ojos le sonreí
Flug-Perdóname Black Hat...no pude protegerte...
Empece a llorar mucho más, sintiéndome una cosa patética en el mundo, pero el me rodeo entre sus brazos estrechándome y me susurro.
Black-Vámonos a casa...
El me tomo cargándome y empezó a caminar, lentamente, hacía el refugio mientras yo miraba cada facción de el, como si fuera la primera vez que lo miro...o tal vez la última...
