Legión de Héroes

Capítulo 5- La reunión de los 4 ejercitos.

Aterek iba andando a paso apresurado sobre su caballo mientras que lo seguían los soldados al mismo tranco, aún que, detrás de el.

Soldado n°1: Señor.

Aterek: Antes de que me preguntes algo me gustaría saber tu nombre, joven.-sonríe de lado-.

Soldado n°1: Enrique, señor.

Aterek: Vaya nombre, ¿De quién lo adoptaste?

Enrique: De parte mi abuelo señor, que era un Muzáike.

Aterek se queda cayado por unos segundos aún que luego le responde diciendo; "No importa de donde provenga él, importa donde estas tú". Enrique asintió.

Los Muzáikes serian como los Originarios, aborígenes, Indios, como quieran llamarles, los cuales no quisieron entregarles sus tierras al Rey Mozet, se cuenta que los Muzáikes aparecieron mucho antes que los que pueblan el reinó y gracias a ellos y sus dioses fueron creados todos los seres habitantes del Gran Continente.

Luego de varias horas de viaje llegaran al pueblo gobernado por Malazar y un guardia los detuvo para hacerles un par de preguntas.

Guardia: Alto.-los soldados y Aterek se detuvieron frente a el-.¿Motivó de entrada?

Aterek: Venimos.-levanta bien la mirada y mira a los ojos al guardia-. A traerle un recado de parte del soberano Mozet.

Guardia: Gene-escr..-sus palabras eran cortadas por darse cuenta que Aterek era el que le hablaba-.

Aterek: Más atentó a la próxima.-comienza a avanzar con los soldados-.Adiós y suerte.-levanta la mano de espalda-.

Guardia:-se pone a un lado para dejarle paso a los soldados y a Aterek-. Aja...-dice temeroso a las palabras de Aterek-.

Aterek se baja del caballo y deja a 8 de los soldados en el lugar donde bajó cuidando el ganado equino y se lleva a tres de ellos, entre ellos estaba Enrique.

Aterek: Quiero que me acompañen como si fueran mi escolta personal, mientras que ustedes.-señala a los 8 soldados-.Se quedaran aquí cuidando los caballos.

Los soldados asintieron y se quedaron cuidando al igual que los otros lo obedecieron y lo siguieron hasta los aposentos del Rey lo cual fue fácil de llegar ya que Aterek era conocido por la gente de allí.

Aterek:-entra a los aposentos-. Malazar.-sonríe y se pone frente a su trono junto con los soldados-

Malazar: Siempre tan atrevido.¿Qué es esto de venir hacia mi sin ser llamado?.-ríe-

Aterek: Mozet te deja un recado.

Malazar: Pero hubiera mandado un mensajero.

Aterek: Lo mismo pensé, pero creo que se lo tomó seriamente. Así que cito lo dicho.

Aterek le contó a Malazar lo acontecido con la bestia y sus hijos a lo que el gobernador impresionado respondió un simple "Okey".

Aterek: Es una junta entre los tres gobernantes y el soberano, sin más preámbulo. Adiós.

Aterek se retira del rey y va rápido hacía los caballos evadiendo preguntas de la gente.

Enrique: Aterek, ¿A qué pueblo nos dirigimos?.

Aterek: A coret. Así que, vamos muchachos monten esos caballos y avancen que nos queda aun dos pueblos más.

Los soldados junto con Aterek se subieron a los caballos y comenzaron a ir al pueblo gobernado por Franco, decidieron tomar el camino más corto, aún que sea un camino imposible pasar se lo pasaron con poco esfuerzo y llegaron.

Aterek: Coret...-sonríe y suspira levemente a la par que respira profundo-. Ese aire puro y fresco

Enrique: Se ve que le gusta este pueblo.

Aterek: Pase 15 años de mi vida aquí, los mejores 15..Bueno, vamos avancen.

Fueron recibidos en la entrada y llevados ante Franco al cual le contaron lo mismo que a Malazar

Franco: Se ve un poco fuera de nuestras manos esto, pero bueno lo haré, e iré y no solo por temas políticos sino que de vez en cuando hay que pasar tiempo con nuestros amigos.

Aterek: ¿Tomar unas botellas de vino y comer cordero?.¿Eeeh?.-ríe a la par de los demás-. Okey, sera mejor que vaya a decirle a Malaquias, el cual es el último.

Franco: No te paro, tu ve.

Volvieron a viajar, esta vez al pueblo de Malaquias.

Soldado n°8: ¿Con que Musgar?

Soldado n°6: Eso esta en las montañas, justamente donde fuimos entrenados todo los soldados.

Aterek: ¿Crees que no estoy enterado?. A unas pocas galopeadas hay un establo, en el cual podemos dejar los caballos y arrancar a pie.

Los soldados asintieron y hicieron justamente lo que dijo Aterek, dejaron a caballos y comenzaron a pie.

Enrique: -enciende una antorcha ya que se hizo de noche-. Okey, estamos bien orientados..¿No?.

Aterek: Conozco estos terrenos como la palma de mi mano, ustedes no se preocupen, están en mis manos.

Soldado n°2: Lo que dijo tiene doble sentido.-sonríe de lado-.

Mientras caminaban empiezan a escuchar ruidos y crujidos.

Enrique:-se gira bruscamente y alumbra en el lugar de donde proviene el sonido-. No es nada, menos mal.

Aterek: No se confíen, puede haber ocelotes o gatos de montes.

Soldado n°2: Oí que son del tamaño de un perro.

Aterek: Oíste bien, tal vez un p..-es atacado por un Hombre-.

Enrique: ¡¡Norientes!!.-grita para ser escuchado por los demás y le clava un puñal en la garganta al que atacó a Aterek-.

Aterek: Gracias.-empuña su espada y se pone en guardia al igual que los demás-.Formen un circulo y coloquen la espada en posición vertical!.

Los soldados escucharon sus ordenes y la cumplieron, a lo lejos un soldado dice escuchar aullidos y gente corriendo.

Aterek: Prepárense.

Piedras empiezan a caer como una lluvia sobre ellos y son golpeados, dos de los soldados recibieron fuertes golpes en la cara y fueron noqueados.

Enrique: Son muchos!!

Una manada de 20 norientes acompañados con lobos van hacia ellos y antes de atacarlos mueren todos por flechazos.

Enrique: ¿Qué demonios?.

Entre la sombra se veía un ejercito cargado por los más finos armamentos y guiados por un hombre alto de pelo largo y piel muy blanca.

Aterek:-alza la vista y sonríe, esa sonrisa se borra rápidamente cuando ve a los soldados que eran comandados por un hombre muy peculiar-.