Capítulo 16 - Poder y Control.

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El sonido de un vaso de cristal deslizándose por una barra de madera...

Un bar algo oscuro pero con algunos clientes en el lugar, y un barman limpiando los vasos, un barman que claramente Todoroki ya había visto hacía tiempo, era el "portal" que llevó a todos esos villanos alguna vez a la UA. El joven de cabello bicolor no podía evitar sentirse intimidado mientras recibía en la barra un nuevo vaso de jugo por parte de ese barman, Kurogiri.

Trataba de no hablar absolutamente con nadie ni siquiera de voltear, quería evitar toda clase de contacto, por ello incluso se había puesto la capucha de su chamarra ya que sinceramente la compañía con la que Dabi le había dejado no le daba mucha confianza...

Por su lado, la persona que estaba al lado del joven no era otro que Shigaraki quien parecía fastidiado de haber aceptado el papel de niñera mientras Dabi quien sabe que tanto hacía sin haberse presentado durante todo el día, su excusa había sido simple, que iría a recorrer el lugar a ver que nuevas había.

— Maldito... Siempre hace lo que quiere. —Gruñó el muchacho de cabello celeste rascándose el cuello con molestia mientras bebía de un vaso con jugo, parecía que era el jugo que estaba compartiendo con Todoroki para retenerlo ahí. No es que Shōto no hubiese tenido el pensamiento de huir, pero con la demostración que Shigaraki le había dado de su Quirk prefería mantenerse con un perfil bajo.

Dabi le había dejado ahí yacía horas desde la mañana, estaba aterrado pues nunca creyó que dicho azabache fuese estar involucrado con sujetos tan peligrosos, en especial con alguien como Shigaraki que había ido a hacer de las suyas a la escuela sin plena invitación provocando un gran caos junto a su extraña "mascota" Noumu, pero así era ante los ojos de Todoroki.

— ¿S-Siempre?—Preguntó el menor sin querer, lo que había evitado por horas y vino a romper su silencio, pero no pudo evitarlo, se había sentido obligado a responder. El joven de cabello celeste se detuvo un momento dejando en paz su cuello para volverse de forma lenta hacia Todoroki quien paso saliva secamente.

— ¿Si hablas? Creí que eras mudo. —Murmuró mirando fijamente al menor, le parecía hasta gracioso que este tuviese ojos de diferente color pero no se burló de eso, parecía molesto. — Eso quiere decir que... ¿Me has ignorado todo este rato? Eso no me gusta... —Agregó con clara molestia, sentía que Todoroki era igual a Dabi en ese aspecto que evitaban la charla o sólo parecían burlarse de él. En cambio Shōto sabía que esa no era la razón por la que lo había hecho, estaba asustado aunque tratara de ocultarlo, ¿Cómo quería que le hablara a la primera?

— No te estaba ignorando es que... No sabía si era correcto hablarte. —El menor se preguntaba que era peor en ese momento, ¿Estar con Dabi o con el sujeto que atacó a su escuela y podía pulverizar con el tacto?

— ¿Fue Dabi quien te dijo que no me hablarás, verdad?—Cuestionó con un semblante de pocos amigos, y no mentía, el menor lo recordaba mientras caminaban por el callejón para entrar por atrás, escuchaba lo que el azabache le decía "Y será mejor si no les hablas. No les hagas entrar en confianza contigo." Lo peor, para Todoroki, era que sentía que no podía mentir en ese momento, pero el miedo a negar o afirmar le dejo sin respuesta sólo mirando a los ojos carmín de aquel hombre de cabello celeste. — Es un maldito... Que fastidio, me hace enfadar.

— ¿Por qué?—Todoroki casi se rompe el vaso de cristal en la cabeza por haber preguntado de nuevo y haber hecho que esa conversación se mantuviera viva. En cambio Shigaraki no pareció expresar algo más que una sonrisa burlona.

— Porque es un estúpido... Cree que puede hacer lo que quiera y me subestima. Ah, ¿Pensará lo mismo si te hago algo?—Fue en un parpadeo que Todoroki sintió que su vida abandonaba su cuerpo al momento en que sintió como tres de los dedos del mayor se posaban en su cuello por sobre su yugular. — ¿Eres importante para él?—Agregó en un murmuro gélido acercándose más al menor que parecía una estatua, no tenía a donde huir, su banco quedaba contra la pared, no podía ni retroceder e intentar algo para defenderse sólo podría empeorar las cosas.

Go Fuck YourselfWhere stories live. Discover now