Jeon Jungkook, era un chico tranquilo y talentoso, amigo de sus amigos, buen estudiante.
Kim Taehyung, era un chico ruidoso y energético, un romántico empedernido, misterioso.
Sus caminos separados se entrelazaron, formando una carretera cubierta de...
Me desperté en la cama, aun desnudo, la luz del sol que traspasaba las ventanas consiguió despertarme. Y aun dormido, me estire bostezando.
— Buenos días Tae. — dije sin mirar el vacío que había a mi lado — ¿Tae? — mire a mi lado de la cama, notando que la presencia de Tae no estaba.
Me levante de la cama y fui al baño para ver si estaba ahí.
No estaba.
— ¿Tae? — llame en medio de la vacía habitación.
Agarré el móvil algo preocupado para ver si Tae me había mandado algún mensaje.
Tenía mensajes de Yoongi, y solo uno de Tae.
*Leyendo mensaje de Yoongi*
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¿Tae ha desaparecido? ¿Me ha olvidado?
Tenía que mirar el mensaje de Tae, seguro que todo resultaría una broma de mal gusto.
*Leyendo mensaje de Taehyung*
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—
No... No...— susurraba para mí.
Busque el número de teléfono de Tae, marque y lo llame.
.... ... ...
El teléfono estaba apagado o fuera de cobertura...
¿Estaba pasando de verdad? ¿Tae me ha olvidado?
— Necesito sentarme... — me senté en la cama mareado, sudando frio, notando como mi cuerpo estaba temblando, podría jurar que estaba llorando, pero no sentía nada.
Fue el peor día de mi vida...
— Tae...
¿Cómo pude cambiar todo en un instante?
¿Cómo te fuiste de mi vida tan rápido?
— ¡¡¡TAEHYUNG!!!— grité a pleno pulmón llorando fuertemente, sintiendo un fuerte dolor en mi pecho, cerrando los puños, golpeando la cama.
¿Cómo paso de ser felicidad, a sentir la mayor tristeza y dolor que jamás había sentido?
Todas las promesas que él y yo hicimos, todo lo que habíamos hecho juntos, todo lo que habíamos vivido... ¿Para él no ha pasado?
Mi teléfono sonó.
Era Yoon Gi.
— Baja a la calle ya. —dijo, rápidamente colgó.
Agarré mi ropa, me vestí como pude sin caerme al suelo.
