♡ BAD AUSTRALIAN BABY. ♡

21. El beso.

La fiesta, como normalmente ocurre se tornó algo fuera de control. Al principio todo era elegante, muchísimo, todos los chicos en traje y las chicas en vestidos lindos. Hasta que los padres de Alyssa se fueron y todo se salió de control.

No me arrepiento de nada, he besado a tres o cuatro tipos y ha sido una noche fantástica.

Sigo bailando al ritmo de la música mientras tomo otro trago rápidamente, Bruce baila a mi lado y me siento feliz. Sé que probablemente es por la cantidad de alcohol que he ingerido, pero no me importa.

—¿Vamos a la barra?—grita Bruce encima de la música, asiento. Lo sigo a la barra y ahí pido un shot de tequila.

—¡Por Alyssa!—gritó riendo, me lo tomo de una sola y siento mi garganta arder.

—Aria... eres hermosa—murmura Bruce a mi lado, niego con la cabeza.

—Gracias por ser mi amigo, Bruceeeeee. —Chillo, lo llevó a la pista y seguimos bailando.

Unos tipos me llevan más tragos y gustosa los acepto, me siento tan feliz. Tomo a Bruce de la mano y lo acerco a mi.

—Eres el mejor amigo que pueda tener alguien, Bruce—balbuceó, sintiéndome un poco mareada. Me alejo de él y corro a la barra, me subo arriba de ella y comienzo a bailar.

Comienza a sonar la canción que solía representarnos a Adam y a mi y mi corazón se estruja. Adam. Hace tanto no pensaba en él. La canción cambia pero la tristeza se queda conmigo, más chicas se han subido a la barra conmigo y eso ya no me hace sentir del todo bien. Por un momento lo extraño.

Pero sigo bailando y tomando, creyendo que eso me hará sentir mejor.

Harry Styles POV.

—Ya son las dos, Chloe—murmuró molesto. Ella suspira.

—Tienes razón, deberíamos de ir por ella...

La miro y me aprovecho de que se ve lo bastante soñolienta para decir:

—Quédate, cariño. Se ve que mueres de sueño, yo iré por ella ¿si?—la beso en la frente y me alejo de ella.
Ella asiente y antes de salir escucho su "Cuídate, te amo"

Me apresuro a subir a mi auto, el castigo que le espera.
Conduzco por las vacías calles de Nueva York hacia donde se haría la fiesta de la tal Alyssa, la música retumba cuando llego y sé que Aria estará lo suficientemente ebria ya.

Me adentro a la fiesta y una multitud de chicas se me acercan pero las ignoro. Busco con la mirada a esa pequeña y la visualizo bailando en la barra con otras chicas.

Me detengo por unos momentos a observarla detalladamente, cuán rápido ha crecido... Cuánto tiempo he pasado con ella y nunca me había dado cuenta de que cuando está feliz los ojos se le hacen pequeños. Baila al compás de la canción que retumba y se ve hermosa. Se ve libre. Se ve feliz.
Y mi corazón se acelera, me siento completo por unos momentos y por unos segundos siento eso que todos los absurdos libros dicen del verdadero amor. Pero yo no puedo quererla. No debo.

Sacudo mi cabeza tratando de sacar esa absurda idea de mi cabeza. Me acerco a ella y ella no me observa. —Vámonos, Aria.

Me mira desde la barra y me sonríe, baja de la barra y se sienta en ella—Harreeeeh, que bueno que viniste... sabría que me extrañarías—Dice riendo, apesta a alcohol.

—Vamos, te sacaré de aquí.

La tomó en brazos y la cargó hasta la salida, ella comienza a patalear cuando casi llegamos al auto y la bajo.

—¡Gracias! Yo también sé caminar, tonto—susurra, se tambalea un poco y la tomo de la mano. Se sienta en la banqueta y me siento al lado de ella sin saber que hacer. Comienza a llorar después de un rato que se sentó en la banqueta. —Lo siento, yo solo me siento tan mal, Harreh, no quiero ser así con Chloe. Ella
me ama y yo me acuesto contigo pero es grandioso, digo, eres muy bueno.

Sonrió, tratando de reprimir la risa. —Harreh, lo siento, lo hice. Te desobedecí, papi pero me gustó, diablos me gustó tanto.

Mi corazón se acelera. —¿Qué hiciste, Aria?—Mi voz suena un poco temblorosa.

—Los besé, papi. Los besé.

Después veo como se tapa la boca y corre hacia un arbusto, tomó su cabello escuchando como vacía todo el alcohol que ingirió, le doy unas pequeñas palmadas en la espalda.

—Tranquila, cariño.

Una vez que deja de vomitar la cargo para llevarla al auto, ella balbucea algunas cosas y le abrochó el cinturón de seguridad.

—Bésame, papi. Follame aquí. Te lo ruego.—murmura, suspiro.
Me subo al auto y ella sigue balbuceando hasta que sus ojos van cerrándose poco a poco. Llegamos a casa y ella está completamente dormida. La subo hacia su habitación y le quito los zapatos de tacón, la observo un momento y decido que es hora de irme.

—Descansa, cariño.

Y dejo un casto beso en su frente.
Mañana será otro día.

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Okay, lamento no haber actualizado pero literal estaba apunto de dormir cuando BAM la inspiración y una idea de cruzo en mi mente y debía escribir, jaja espero lo disfruten y voten, i love u girls.