Abril Miller
Bruno se dirigió al hospital del pueblo en busca de mis estudios mientras yo descansaba en aquella cama, cuyos recuerdos me enrojecían.
Los mareos y mi mal estar comenzaron a ser un poco más frecuentes, pero no le preste mayor importancia.
Me encontraba descansando en la cama del hombre que amaba y era el mismo que había causado en mi interior un sentimiento de angustia inmenso.
Pasado un rato comencé a escuchar algunos ruidos extraños provenientes del hall de entrada de la cabaña de Bruno -Debe tratarse de algún gato- Pensé en mis adentros.
Escuche la moto de Bruno llegar, seguido ruidos de llaves alborotadas, como si Bruno tuviese urgencia de ingresar, un sentimiento de inquietud invadió mi cuerpo, así que decidí salir de la cama e ir al encuentro de Bruno, pero lo que vi al bajar las escaleras me paralizo: Un hombre parado en el marco de aquella puerta de madera y en sus pies Bruno, acostado boca abajo, visualice un cuchillo en la mano de aquella persona y sangre en la espalda de Bruno.
Un grito se escapo de mis labios casi sin pensarlo, todo me recordaba a aquella noche cuando tenía 6 años y marco mi vida para siempre.
El hombre tomo el cuchillo una vez mas con ambas manos y mirando directo a Bruno dijo en voz alta
-Te advertí que no vuelvas a acercarte a ella
Todo mi cuerpo se encontraba paralizado, el miedo recorría mis venas, sentía un sudor frio corriendo por mi nuca. No podía dejar que la historia se repita una vez más, corrí hacia Bruno lo más rápido que pude envuelta en terror, intentando evitar que continúe haciéndole daño, pero mi esfuerzo fue en vano, aunque corrí con todas mis fuerzas el cuchillo volvió a impactar en el cuerpo de Bruno. El mismo impulso que me llevaba hacia él a gran velocidad, hizo que mis manos puedan empujarlo con gran fuerza, haciendo que caiga velozmente al piso y su cabeza revote contra la mesa ratona dejándolo inconsciente.
Me acerque al cuerpo desvanecido de Bruno mientras con mi móvil marcaba el 911, la sangre roja y espesa brotaba de su cuerpo, no pude contener las lágrimas, lo voltee y tome su cuerpo entre mis brazos. Alguien contesto del otro lado de la línea
-Por favor necesito una ambulancia y que vengan de inmediato
- ¿Qué sucedió? Dicte la dirección y estaremos allí de inmediato- Contesto la voz del otro lado de la línea
-Alguien ingreso a la cabaña de mi novio, él está muy mal. La cabaña se encuentra en la esquina de Derqui y La plata. ¡Necesitamos que vengan lo antes posible! - Comande, tirando el teléfono a un lado y tomando el rostro de Bruno con ambas manos
-Bruno, mi amor, no me dejes- Suplique
El entreabrió los ojos y me miro una vez más, como tantas veces lo había hecho. Mi llanto comenzó a ser desconsolado, el aire se me entrecortaba imposibilitándome respirar bien
-Por favor, no me dejes- Le suplicaba ahogada en llanto
-Te...amo...Abril- Contesto con la voz débil
Lo abrace pidiéndole a Dios que no se lo lleve, lo necesitaba conmigo. Bruno se desvaneció en mis brazos antes que pudiera darme cuenta, las lágrimas no paraba de brotar de mis ojos.
Aquel hombre comenzó a tener conciencia una vez más, bese a Bruno en la mejilla, no sabía si ese podía ser nuestro último beso, pero había algo que si sabía: No iba a dejar que mi historia me atormente nunca más.
Tome el cuchillo con una de mis manos, el miedo recorría todo mi cuerpo, mis manos temblaban de una manera exagerada. Aquel hombre se levantó tomándose la cabeza con las manos, intente visualizar su cara, pero fue imposible, un pasamontaña cubría su rostro.
-Que quieres? - Grite furiosa mientras las lagrimas caían de mis ojos. El hombre no omitía sonido, se encontraba completamente quieto mirándome fijamente. Comencé a oír la sirena de la policía y las luces rojas y azules comenzaron a filtrarse por la ventana iluminando dentro de la casa. Gire mi cabeza para poder ver los patrulleros cuando aquel hombre me empujo con ambas manos, haciéndome caer en el piso de la cabaña. Vi al hombre correr y casi sin pensar comencé a correr tras el
- ¡Fue el! Ayúdenme por favor- Gritaba, mientras los policías bajaban a rápida velocidad de los patrulleros para perseguirlo. No pudo llegar muy lejos, un oficial de policía lo intercepto a los pocos metros de la cabaña.
Mientras veía a Bruno ser subido a una ambulancia para ser trasladado, note el cuerpo de aquel hombre arrodillado de espaldas a mí, a unos cuantos metros de donde me encontraba. La incertidumbre invadió mi ser, comencé a caminar entre patrulleros de policía con un punto fijo, debía descubrir quién estaba detrás de todo esto.
Todo comenzó a estar en una especie de cámara lenta, en cada paso que daba mi mente se invadía de recuerdos, venían a mi mente imágenes, una tras otra como baldes de agua fría.
Podía ver claramente esa noche, como aquel hombre ingreso a mi casa con gran violencia y arremetió contra mi padre y entre gritos siguió por mi madre, yo me encontraba junto a la pared. Mis hermanos rápidamente se escondieron bajo la mesa mientras los relámpagos iluminaban la casa, aquel hombre se arrodillo delante de ellos y los daños de muerte, acto seguido se levantó y me miró fijamente, el miedo me paralizo. Al intentar ver su rostro un pasamontaña lo cubría y me lo imposibilito.
Las lágrimas no paraban de caer mientras caminaba hacia él, notaba que se trataba de la misma persona. Lo ultimo que recuerdo es ver al hombre dirigirse a la puerta trasera con un saco negro sobre él.
Los recuerdos terminaron cuando llegue a él, se encontraba arrodillado delante de mí, el pasamontaña se encontraba tirado a un lado, mire su rostro y lo reconocí enseguida.
Mi corazón se estrujo.
ESTÁS LEYENDO
El hombre del saco
غموض / إثارةUn misterioso crimen ha quedado sin resolver durante años. Una familia entera asesinada de las maneras mas sangrientas y una única testigo; Una inocente niña de 6 años de edad. Durante mucho tiempo el detective élite del pueblo intento revelar la ve...