Historias del Libro - Allison vuelve a Casa [Tom Hiddleston Jim Sturgess Fanfic]

Prince Adam - Part I

El teléfono suena y suena y suena. Es decir, llama y llama y llama, ya que nadie le responde. Debería haber recibido la llamada de Steve hace horas, pero nadie responde. Su amigo no es el ejemplo de la responsabilidad, pero está convencida de que él no dejaría de llamarla, sabiendo que la dejó sola en el extranjero, en un país que no termina de comprender. Seúl no es su lugar en el mundo, definitivamente. Aunque hermoso, no consigue adecuarse a las pocas costumbres que tiene que respetar para no ofender a nadie, muchos la observan como si fuera de otro planeta y las otras chicas no pueden entender como prefiere unos cómodos jeans y una remera enorme antes que pasearse en un vestido cortísimo de YSL. No, olvídenlo.

Allison es delgada y alta. No es particularmente curvilínea, pero tiene sus atributos bien ubicados, cabello corto castaño cerca de los hombros, una sonrisa dulce e inmensos ojos celestes. Tal vez sus ojos son su mejor arma y carta de presentación: resplandecen cuando está feliz, y destilan inteligencia el resto del tiempo. Allie no es una niña ingenua, oh no, pero tal vez un poco tímida si se siente incómoda.

Este país la pone incómoda. Y ahora se ha quedado sola. Y esta noche, en dos horas, saldrá a cenar con un grupo de representantes de una discográfica. Sólo una cena entre socios de negocios. Sí, claro.

Son las 7 PM y Steve debería haberla llamado hace horas. Vuelve a intentar comunicarse. Nadie atiende. Intenta escribiéndole. Nada. Está preparándose para la salida, cuando su teléfono suena.

—¿Hola?

—¡Señorita Allison! Soy Myen Ri —Oh, ¿dónde estará Steve?—. Pasaré por usted en 45 minutos, ¿está bien?

—Sí claro, es perfecto... genial. —está secándose el cabello en ropa interior, sin saber qué ponerse—. Myen, ¿qué crees que deba vestir? Quiero decir... ¿algo muy formal? ¿Un vestido? O algo más sencillo... ¿qué vas a ponerte tú?

—Saldremos a bailar una vez que terminemos de cenar, así que debería vestirse cómoda, le encantará. Steve dijo que adora bailar. Es una cena entre amigos, no se preocupe por favor.

—Bien, te veré en un rato entonces.

Lo tengo. Ya sabe exactamente qué vestir. Reanuda el trabajo en su cabello, pero nuevamente suena el telefono. Observa la pantalla: Steve.

—Santo cielo, ¿dónde estabas?

—¡Hola! ¡Buenas noches! Eeehhmmm... acabo de encontrar este teléfono en el metro. Una voz masculina.

—¿En el metro? Oh no... ¿en el metro de qué ciudad?—. Otra vez se las ingenió para perder su celular, ¿cómo puede ser tan descuidado?

—En Seúl, ¿dónde estás tú?—. Es extraño, pero suena británico.

—También en Seúl. El teléfono que tienes es de uno de mis amigos. ¿Crees que podría... hhmm... recuperarlo?—. Eso es una tontería, claro que puede recuperarlo. Si no quisiera dárselo, nunca hubiese llamado. —Yo... aahh...

La voz emite un suspiro y responde, levemente exasperada. Típico de inglés. —Claro que puedes recuperarlo, por eso llamé. Estoy ahora mismo en la estación de Jamsil, ¿estás cerca?

¿Jamsil? ¿Dónde queda eso?. —Déjame ver, estoy en el distrito Gangnam, así que no sé si...

—Eso es al menos a 50 minutos de aquí. —se escuchan pasos del otro lado de la línea y la voz se agita— ¿Puedo escribirte luego? Estoy a punto de reunirme con alguien. Hasta luego, Allison. Blip. Se ha ido.

Luego de recuperarse del impacto inicial de que un completo desconocido le corte el teléfono (y luego no atienda la docena de llamados posteriores), se viste a las apuradas y Myen Ri golpea su puerta. No ha tenido tiempo de arreglarse como hubiera querido, pero el resultado general es bastante satisfactorio. Se ve sexy, pero con mucha clase. No es una tarea fácil, pero se puede lograr si tienes unos pantalones blancos ajustados a la cintura, un top negro que muestra lo justo y necesario y stillettos negros con una fina plataforma blanca. El cabello al costado, lo más lacio posible, y una chaqueta... un abrigo... un blazer....rayos, nada hace juego con esto... sin abrigo. Yendo a una cena casual de negocios con amigos sin abrigo, nada puede salir mejor canturrea mientras toma la cartera y sale de la habitación. Myen Ri aprueba el estilo, también se ve sexy con un ajustado vestido azul. Por suerte tiene un abrigo.