House of Jealousy

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Así que... esto es un ataque de celos.

Allison estaba muriendo de calor en ese delantal. Todo su interior estaba revuelto, confuso, en llamas. Así se sentía, como estar en llamas, un dolor insoportable y calor, calor, calor.

O rabia... o furia...

Podría haber tolerado ver llegar a Adam. Luego de la experiencia del parque, estaba convencida de que nada podía salirle peor. Se había quedado paralizada como una idiota, helada mientras la tocaba. Algún primitivo instinto de supervivencia se había disparado, y logró detenerlo a tiempo antes de que la besara... pero no más que eso. Adam se había despachado con el yo creo en nosotros, y todas sus teorías y suposiciones se destruyeron en un instante. No había renunciado a ella, ni por casualidad. Yo no, le respondió, cuando en verdad debió decirle por favor ayúdame a creer de nuevo, te lo imploro. No pudo tolerar su tristeza, y huyó como la cobarde que era.  

Voy a destrozar este maldito lugar.

Como decía, probablemente hubiera tolerado verlo, pero no con alguien colgando de su brazo. Le repugnó su disfraz, sus guantes turquesa, el vestido rojo terriblemente escotado, su peluca. Lo que la sacó de las casillas fue ver que esos labios carnosos pintados a la perfección le hubieran dejado una marca al cuello de Adam. La mancha carmesí brillaba en su piel blanca como un faro en una noche sin estrellas, y Allison no podía ver otra cosa. Lo marcó como si fuese ganado

- ¡Ben, feliz cumpleaños! - Dom lo abrazó con efusividad. Lo miró a los ojos y su amigo, que aún le sostenía la mano, se estremeció.

Adam tenía un disfraz extremadamente sencillo, pero lo lucía de tal manera que era imposible que pasara desapercibido. Básicamente era una chaqueta abotonada al frente, una gorra de chofer, guantes negros de cuero... y ese antifaz.  Sus ojos refulgían por el constraste, pero luego de una observación rápida, Allie notó que era un reflejo de la luz. No había brillo alguno en su mirada, ni emoción. Por un momento pensó que se había confundido, y que ése no era Adam. Tan distante y serio, de ninguna manera podía ser el mismo chico que la había conquistado con esa sonrisa arrolladora. 

Ben la soltó para saludar a Adam. Se abrazaron brevemente, y algo de la calidez que lo caracterizaba se le escapó en una pequeña sonrisa. Sí, es él. La chica se adelantó y besó a Ben en la mejilla. Le entregó un obsequio, y luego de los agradecimientos de cortesía, Allie notó que los ojos de los recién llegados se posaban en ella. La sangre le hervía en las venas.

- Qué buen disfraz, es magnífico. - Dominic la miraba asombrado. Se había disfrazado como Loki, y bien podía pasar por el dios de las travesuras. 

Ben se apresuró a rescatarla. - Sí, es genial. No es solo el disfraz, aquí todos son personajes. Ni creas que va a hablarte, salvo que sea para cortarte el cuello.

Allie miró a Dom a los ojos. Él le devolvió la mirada. Se quedaron desafiándose un instante, y el dios se rindió. Rió alegremente, y la apuntó con su cetro. - Supongo que no debo meterme contigo... no sé qué te puso tan furiosa, pero mejor no saber.

- ¿Por qué deberías temerle? Tan solo es una enfermera zombie, o alguna de esas cosas...  - Rose la miró con desprecio. 

Algo en el pecho de Allison amenazaba con abrirse paso al exterior. Le temblaban las manos. Le clavó una mirada asesina, y metió con suavidad la mano en el bolsillo. Hizo un paso, y se detuvo frente a su rostro. Con un movimiento veloz tomó la jeringa y se la apoyó en el brazo a Rose, que saltó aterrada a un lado. Se aferró al brazo de Adam.

- Deberías. - Le hizo el gesto de silencio, poniendo un dedo frente a su boca, y guardó la jeringa.

Dom estalló en una carcajada. Ben se quedó estático, no sabiendo si reírse o llorar, y Adam se separó suavemente de Rose. Comenzaba a abrir la boca para decir algo cuando sus amigos Timothy y Theresa irrumpieron en el grupo. Allie aprovechó la oportunidad para irse.

Historias del Libro - Allison vuelve a Casa [Tom Hiddleston Jim Sturgess Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora