Una latina en BTS.

Capítulo 20: Corazón roto.

Una semana después; noche de la entrega de premios.

Avril se encontraba pensativa en su cuarto, parada frente a la cama solo en ropa interior. Sobre esta había dos vestidos. Uno rojo carmín y uno negro. A exepción del color, ambos eran exáctamente iguales, pues eran cortos hasta la rodilla, tenían escote de corazón y se sostenía de los hombros. Su cabello tenía su típico toque; lacio con las puntas onduladas.

La puerta se abre de repente, dejando ver a J-Hope con un saco floreado, pantalones negros y zapatos del mismo color. Su cabello anaranjado estaba peinado al estilo de las dos aguas, dándole un toque despeinado.

—¿Te falta mucho? —le pregunta este como si nada.

—No sé cual ponerme —contesta ella sin mirarlo—. Creo que el negro podría usarlo en otra ocasión, pero es más cómodo. Y rojo hará que llame la atención, pero no estoy acostumbrada a usar este tipo de cosas de niña bonita.

A la latina no le importaba que su mejor amigo la viera en ropa interior, pues, además de tener confianza, pensaba que era lo mismo a que la viera en traje de baño. De todas formas, cubría lo mismo. Pero el pelinaranja no pensaba eso, esta había sido la primera vez que la había visto en ropa interior, y le había encantado. Admiraba el cuerpo de la chica, resistiéndose a tocarlo cada vez que lo veía.

El mayor cierra la puerta y entra, adentrandose hasta pararse a su lado.

—Mhm... —piensa, poniendo sus brazos en jarra— el rojo. —elije apuntándolo.

—¿Tú crees? —frunce el ceño— ¿No piensas que llamaré mucho la atención con ese?

—Es cierto, ponte el negro —bromea con sus típicos celos, logrando que ella suelte una pequeña risa—. No, es broma —sonríe—. Me gusta más el rojo. Además, no voy a separarme de ti en toda la noche, asi piensan que eres mi novia y no te miran. —planea.

—Eres un maldito celoso. —ríe ella para luego abrazarlo.

—Tú buscas ponerme celoso. —le devuelve el abrazo.

Hoseok siente como su corazón se acelera de repente, como cada vez que la veía, tocaba y abrazaba. Si bien estaba enamorado profundamente de ella, no dejaba pasar el hecho de que seguía siendo un hombre, un hombre al que le gustaban las mujeres. Y, Dios, el cuerpo semidesnudo de su chica estaba apoyado sobre el suyo. Por su mente pasó la imagen de él tocándo lentamente cada centímetro de aquella obra de arte que tenía al lado, pero sacudió levemente la cabeza, alejando aquellos impuros pensamientos.

—Bueno —suelta él separándose lentamente—. Voy abajo con los chicos así te cambias tranquila —se acerca a la puerta y la abre—. El rojo, no lo olvides. —le sonríe antes de salir.

Avril sonríe una vez que su amigo no está en la habitación. Toma el vestido rojo y se lo pone. Después toma unos zapatos negros con taco de aguja y se los coloca, completando su vestimenta. Se acerca al espejo y se mira, poniéndose también de costado y espalda para verse bien en el reflejo. Cuando considera que ya está lista, se acerca a la puerta, la abre, y baja las escaleras, caminando hasta el living. Todos los chicos estaban allí, al igual que los miembros del staff, quienes esperaban a la chica.

—Wow —suelta Taehyung—. El rojo te queda bien.

—Demasiado bien. —replica Jungkook con una sonrisa.

J-Hope solo lograba mirarla de pies a cabeza, incapaz de decir algo ante tal belleza.

—Tendrías que usar ese color más seguido. —opina Namjoon, quién rodeaba con su brazo a su novio.