El beneficio de la duda

Capítulo 2: #SabesAlgoDeJeremy

Aquel sábado, cerca de las once de la mañana, ya con un cielo completamente despejado, Adele se encontraba aun durmiendo pues aunado al hecho de que se había acostado tarde y Jeremy despertarla afecto su ciclo de sueño, pero una llamada inesperada irrumpió en su sueño, ella tomo su celular y lo contesto sin siquiera ver quién era el remitente.

—Buenos días, ¿Aun este es el celular de Adele?

—Buenos días, ¿Quién la busca?

—Adele, soy la mamá de Jeremy, solo llamaba para saber si Jeremy se quedó dormido o si está contigo— dijo intranquila.

—No señora, pero no se preocupe Jeremy paso a mi casa a despedirse—dijo sin pensar muy bien en lo le acababan de preguntar

— ¿Enserio? ¡Qué alivio! Entonces yo supongo que ya viene en camino.

Eso termino por despertar completamente a Adele.

— ¿A qué se refiere con ir en camino?

—Que debe venir ya en camino, por cierto ¿Sabes porque no se levantó temprano? Quedo de levantarse más temprano.

Adele comenzó a sentirse preocupada.

—Señora, Jeremy vino a mi casa antes de las cinco de la mañana, es imposible que no haya llegado a Blueberry.

— ¡Oh por Dios! Jeremy, algo debió pasarle, ¿Adele sabes algo más?

Pero Adele dudo por un segundo si contarle o no acerca de que Jeremy iba un lugar que ella ni siquiera sabía dónde era.

—No Señora, no tengo más información, ¿Ha podido contactar con él?

—Ni una sola llamada entrar, me voy a poner en contacto con los departamentos de policía, Gracias, Adiós...

Súbitamente la madre de Jeremy corto la llamada a Adele, pero ella se quedó con la intriga de que era lo que le había pasado Jeremy, definitivamente algo no andaba bien, pues no era normal que él no contestara las llamadas...

Pasados unos minutos le envió: un mensaje de texto, un mensaje de chat y hasta un correo electrónico preguntando por su estado e ubicación y después intento con una llamada la cual ni siquiera entro a un buzón pues la operadora automática le respondió que tal número no estaba disponible.

Un par de horas después ella se encontraba en la sala de su casa, aun con la piyama haciendo llamadas a toda la gente que conocía a Jeremy, nadie sabía nada de él, acababa de terminar una llamada con una de sus amigas, cuando alguien llamo a su puerta, ella dio un brinco y rápidamente se dirigió a la puerta y por la mirilla vio a dos adultos muy bien vestidos, se trataba de los padres de Jeremy.

—Hola Adele ¿Podemos pasar?— pregunto el padre de Jeremy.

Ella noto que su madre se mostraba muy angustiada como para si quiera entablar una conversación.

—Hemos ido en búsqueda de Jeremy por el camino que suele tomar, pero al parecer nadie sabe nada de él, no hay rastros de la camioneta o reportes de algún accidente, vamos a llevar este caso a algo más serio, nos ofrecieron la ayuda de un par de detectives que dicen pueden ayudar en la búsqueda—El señor volteó a ver a su esposa quien tenía los ojos hinchados de tanto llorar y continuo. — Estamos creyendo que es posible que lo hayan secuestrado.

Al oír esto Adele se partió en llanto.

—Tu eres la última persona que lo viste, ¿Qué fue lo que te dijo?

Adele pensó que no debía ocultarles información acerca del lugar que ir a visitar.

—Bueno, vino muy de mañana, menciono algo de llenar el tanque de gasolina entre Lakeview y Dew Pass. Y también que pensaba en ir a un lugar al que su abuelo lo llevo, pero no menciono como se llamaba ese lugar.