Prueba de Ingreso Pt. 2

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Lucy dormía.
Yo estaba fuera del refugio provisorio sentado con mi katana en mano. No encendimos una fogata porque revelaría nuestra posición, aunque se veían un par de rastros de humo en el cielo de fogatas hechas por los demás.
El agua de la laguna a escasos metros de nosotros comenzó a desprender un brillo flúor y me acerqué. Mala idea, muy mala idea.
Miré hacia el fondo de la laguna y algo en el fondo se movía. Acerqué más mi rostro para ver mejor.
El brillo del agua me dejó ver con claridad lo que era. Eran solo raíces. Raíces que estaban subiendo hacia mí.
Logré enderezar mi cuerpo a tiempo para que no me dieran, pero las raíces me tomaron de igual forma por los brazos y piernas. Usé toda mi fuerza de apoye y tiré hacia el lado contrario de la laguna.

Podía verlo, lo que sea que fuese eso era enorme y estaba oculto bajo el agua.
Giré mis muñecas enredadas y pude agarrar las raíces con mis manos. Tiré con toda mi fuerza hacia mí y sentí que el peso subía.  Cada vez que un poco de raíz subía la enrollaba en mi brazo y seguía tirando.
Después de forcejear unos segundos logré sacar completamente a la criatura del agua.
Su cuerpo era corteza de árbol. El rostro tenía líneas rojas y las manos también. Sus garras eran completamente rojas. La forma del cuerpo imitaba la de un gorila y su rostro era plano hecho de tres tablones de corteza, el del medio era más largo que los otros dos. En la espalda tenía una esfera roja que irradiaba luz y la cubrían algunas raíces junto a pasto y ramas con hojas. Era un Mortier, una criatura de los bosques que solo atacaba de noche, vaya suerte la mía.

Lo tenía frente a mí. Parado debía medir unos tres metros fácil. Se mantenía en la orilla de la laguna tirando de mí hacia él para adentrarme en el agua, su territorio. Su especie puede estar hecha de corteza y hojas, pero en el agua eran más rápidos, eso fue lo que dijo Orochimaru. Hice fuerza de impulso con las raíces en mis manos y fui hacia el como bala estampando mis rodillas en su rostro de madera. Sentí mis rodillas siendo clavadas en la corteza de su rostro por la fuerza de golpe pero no dolía.
Al Mortier sí pareció dolerle el golpe porque me soltó y las raíces volvieron a él cubriendo la esfera roja. Desenfundé una pistola pero antes de poder disparar me golpeó con su brazo hacia la derecha. Cuando me reincorporé tras chocar con un árbol vi que iba hacia Lucy, me moví lo más rápido que pude y lo embestí sacándole de su trayecto para estamparlo contra un árbol. El monstruo trató de agarrarme con sus garras pero las detuve con mis manos. Salté y me apoyé en su pecho e hice impulso hacia atrás arrancándole las extremidades, se quejó y sabia en lugar de sangre comenzó a caer de donde antes estaban sus brazos.

Volví a sacar la pistola y tomé su plano rostro tirándolo hacia arriba. El error de muchos era pensar que su punto débil es la gran esfera roja en su espalda. El verdadero punto débil está en el cuello. Pegué el cañón de la pistola contra su cuello y disparé haciendo que los pájaros que aún dormían saliesen volando a toda prisa. El Mortier comenzó a secarse y cayó desplomado en el piso. Tres metros de madera seca.
Me volteé y Lucy estaba despertando por el ruido del disparo.
-¿Qué fue ese ruido?- Me preguntó aún algo dormida.
-Un disparo.- Respondí guardando la pistola.- Me atacó un Mortier.
-¿Mortier? Creo haber escuchado ese nombre en algún lado...
-Es una criatura común en algunos bosques con grandes flujos de agua.
-Ya veo...- Bostezó y gateó fuera del refugio.- Por cierto esas pistolas... ¿entonces sí eres mago?- Ella se refería a los magos que su magia requería armas.
-No, son pistolas normales.
-¿Y entonces cómo funcionó contra un monstruo?
-Son pistolas normales especiales.
-Eso... no tiene mucha lógica...- Dijo torciendo su boca con una expresión de confusión y curiosidad.
-¿Debería tenerla?- Me dirigí hacia donde estaba y me senté en el suelo húmedo.
-Bueno, supongo, tal vez...
-Algunas cosas no tienen lógica...- La imagen de Sarutobi apareció en mi mente.- Pero eso no significa que no sean reales.

Unas explosiones se escucharon varios kilómetros detrás nuestro y miramos hacia allí.
-Parece que no vamos a poder dormir tranquilos.
-Probablemente sean monstruos o ataques de un equipo a otro...
-Sí... y si ese es el caso se moverán. Ellos vendrán hacia nosotros.
-Entonces... ¿tendríamos que movernos también?
-No. Los emboscaremos.
-Pero, eso no sería...
-¿Hacer trampa?- Ella asintió.- Las emboscadas son una estrategia básica de combate. Si sabes que tienes un enemigo afuera y no te preparas para recibir una cuando sales al campo de batalla, morirás sin dar un solo golpe.
-Siento que sería injusto para ellos...- Suspiré.
-...Está bien, vuelve a dormir, yo me haré cargo de la guardia.
Sabía que ella no vendría pero tampoco iba a dejarla allí por su cuenta, así que esperé, esperé a que se durmiera y salí en busca de grupos ocultándose en el bosque.

El Último Semidiós: Wrath of Scars. (NarutoxFairyTail)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora