El Último Semidiós: Wrath of Scars. (NarutoxFairyTail)

Neji vs Naruto.

La cabeza era de un león con cuernos curvos y negros, no tenía pelaje en el cuerpo pero sí tenía melena, era roja, su piel estaba llena de quemaduras. El cuerpo era humanoide y las piernas asimilándose a las de un kanguro pero con garras negras, y la cola de un escorpión se asomaba sobre su cabeza lista para atacar.
Rápidamente guardé la espada y tomé la otra pistola mientras retrocedía, pero me detuve cuando noté que el indicador había desaparecido, lanzó un rugido y agachó su cuerpo para abalanzarse sobre mí, entré dentro de un edificio a mí derecha y corrí hacia las escaleras, mientras subía la Quimera me perseguía dando saltos y chocándose contra las paredes debido al poco espacio.

Una parte de las escaleras estaba destruida, tomé la baranda metálica y le disparé sacando una parte del largo de mi brazo, salté sobre el hueco en la escalera y me volteé hacia ella lanzándole la vara de metal incrustándosela en su hombro, doblé mi cuerpo para atrás apoyando mis manos en los escalones e hice una voltereta volviendo a girar para seguir subiendo.
Una vez llegué a la terraza la puerta de esta salió disparada junto a partes de pared y la Quimera se asomó entre el polvo.
-No tengo tiempo para perderlo contigo.- Susurré lanzándome hacia ella.
Giré esquivando sus garras y enterré una espada en su mano, clavándola en el piso, golpeé con fuerza su mandíbula y esta se tambaleó quedando completamente rota.
Introduje mi brazo por su boca hasta llegar a su corazón y lo tomé con mi mano, apretándolo y así destruyéndolo.

Saqué la espada del piso y centré mi atención en los lanzadores. Tenía un pequeño botón, lo presioné y a su lado una luz roja diminuta se encendió, busqué algún otro botón pero no había ninguno, sin darme cuenta doblé mi muñeca hacia arriba y la luz cambió a verde lanzándose una cuerda con gran fuerza y velocidad, bajé la muñeca y la cuerda se cortó sola.
-Es más simple de lo que esperaba...
El comentarista estaba relatando una pelea entre Natsu y uno de los monstruos nivel rojo, y por lo que decía no le estaba yendo muy bien.
Corrí hasta el borde de la terraza y lancé una cuerda allí, comenzando a bajar en rápel hasta la calle.
En un cruce de calles frente a mí pasó corriendo Sherria, siendo perseguida por tres monstruos, dos amarillos y uno rojo.
Apunté mi brazo unos metros delante de ellos y lancé una cuerda, impulsándome con ella y así quedar frente a los monstruos en el momento preciso.

Desenfundé una espada y la coloqué con la punta hacia el frente justo a la altura de mi pecho.
-Ittōryu.- Cargué la espada hacia atrás y me preparé para un impulso.- Akumaoshi (Estilo de una espada: Estocada del Demonio)- Atravesé a los tres en un instante y se pararon en seco unos segundos, para luego caer comenzando a desaparecer. Con esos tenía 105 puntos.
-Los derrotaste... ¡de un solo ataque!- Exclamó Sherria a unos pasos detrás de mí.
-¿Estás bien?- Tenía algunas heridas leves, pero la que peor se veía era el golpe en su cabeza que no dejaba de sangrar.
-Solo son algunos raspones, supongo que esos aún son demasiado para mí. Gracias.

Le asentí y volví a avanzar por la calle en busca de más monstruos.
-¡Oye! ¡Naruto!- Escuché la voz de Natsu luego de recorrer varios metros. Me detuve y se acercó a mí, estaba algo lastimado y se veía agotado.- ¿Cuántos puntos tienes?
-105.
-Oh, ya ve¡¿105?! Yo solo tengo 40, dos amarillos y dos verdes. Demonios. ¿A cuáles derrotaste tú?
-Dos amarillos y tres rojos. Y también uno de indicador negro.
-Bueno, tuviste las mejores notas de la clase durante todo el año, así que era de esperarse, pero al parecer uno logró herirte.- Dijo señalando la herida en mi abdomen.
Una sombra apareció en el suelo y miramos hacia arriba, un minotauro caía hacia nosotros.
Ambos nos hicimos a un lado y se estrelló contra el piso, quebrantándolo.
-Karyū no... ¡Hōkō!- Natsu lanzó un llamarada hacia el minotauro y yo me cubrí con la capucha al estar en su rango de ataque.

El minotauro quedó desequilibrado y salté propinándole una parada en el rostro, se tambaleó y Natsu se movió para golpear su mandíbula hacia arriba con su puño cubierto en fuego, aterricé frente al minotauro y lancé una cuerda con cada lanzador hacia sus hombros, las sostuve entre mis manos y levanté mi cuerpo balanceándome debajo de sus piernas, apoyé mis pies con fuerza y tiré hacia abajo haciendo que cayera de cara al piso.
Natsu saltó y le aventé mis espadas, me deslicé por encima del minotauro caído y lo tomé por los cuernos mientras Natsu clavaba las espadas en su nuca, tiré hacia un lado y le arranqué la cabeza.
-Eso fue bastante rápido. Toma.- Dijo entregándome las espadas.- ¿Pero quién se llevará los puntos?
-Quién sabe.
-A todos los participantes, actualmente restan 17 minutos para el tiempo límite, y quedan un total de 8 monstruos. ¡Hagan su mayor esfuerzo!- Dijo el comentarista.
-Solo 8, demonios, tengo que apresurarme. Nos vemos luego, Naruto.- Dijo Natsu saliendo a toda velocidad.