Quimera.

1.8K 157 50
                                    

Natsu y Gray permanecieron en silencio, no había más nadie que nosotros allí a excepción del baño de mujeres.
-Tú... eso...- Dijo Natsu.- ¿Es verdad?
-¿Por qué mentiría?
-Es que... no lo sé, no sé qué decir...
-Yo-yo tampoco.- Dijo Gray.
-No hay nada para decir, cada persona tiene su pasado.
-Y... ¿fue doloroso?- Preguntó Gray. Salí del agua y les di la espalda avanzando para salir, me detuve y los miré.
-Escuchen, voy a colaborar con ustedes en lo que haga falta, pero les voy a pedir algo...- Ellos me miraron fijamente, curiosos.- No se metan en mi vida.- Dije, y me fui de allí.
Cuando estaba volviendo al hotel fui a una máquina expendedora para comprar una bebida y escuché algunos susurros, observé por el rabillo del ojo y distinguí a Erza siendo arrinconada por un hombre de cabello azul, el tono de él era bruto y amenazante, en cambio el de ella era dócil y temeroso, bastante diferente a su actitud autoritaria que mostró en el correr del año.

No hice ningún esfuerzo por escuchar su conversación, no me importaba en lo más mínimo, pero de pronto vi que el hombre cargó su mano hacia atrás dispuesto a golpearla, y ella iba a dejarlo hacerlo.
Lanzó el golpe y lo detuve por la muñeca sin dirigirle la mirada.
-Tú, ¿realmente ibas a hacerlo, verdad?- Le dije.
-Naruto-san...- Dijo Erza siendo agarrada por él de su brazo.
-Suéltala.- Le demandé al hombre con tono frío y desafiante.
-Detente...- Dijo ella, su voz sonó cortada, como si no tuviera nada de energías. Solté la muñeca de su agresor y enseguida él me lanzó un golpe con la misma mano, lo esquivé y él retrocedió atacando nuevamente con una patada que bloqueé. Volvió a ponerse en guardia y lanzó otro golpe con su otra mano, el cual detuve sosteniendo su puño con mi mano. La sorpresa en el rostro de Erza me desconcertó, como si haber detenido su golpe fuese algo imposible.
Cuando dejó de presionar solté el agarre y él me observó durante unos segundos, era más alto que yo, no reconocí su rostro.
-Te mueves bastante bien...- Dijo.- ¿Cuál es tu estilo de pelea?
-Ninguno en especial.
-Parece que sí hiciste un amigo, Erza.
-Es solo... un compañero de clase.
-No has cambiado nada desde entonces... no espero nada de ti pero, buena suerte mañana.- Le dijo comenzando a marcharse.- Y a ti también, Naruto-kun.

Dirigí mi camino hacia el hotel nuevamente y dejé la bebida que había comprado sobre una banquilla al lado de donde Erza permaneció congelada.
-Espera...- Habló en tono bajo y dudoso. Me volteé a ella y vi su rostro fundido en rojo.- Gra-graci- Levanté mi mano en señal para que se detuviera y bajé la mirada.
-Nos vemos mañana.- Le dije comenzando a avanzar nuevamente.
Subí por el ascensor y por el camino vi a varios compañeros de clase y de la clase B conversando o saliendo hacia, supuse yo, los baños termales.
Mirajane ya estaba acostada, vistiendo un vestido de pijama rosado con volados hasta sus muslos y tecleando la pantalla de su celular con gran rapidez.
-Bienvenido.- Me dijo con su típico tono amable.
-Gracias.- Le dije dejando mis cosas sobre mi cómoda y lanzándome sobre la cama a la par que dejaba salir un suspiro.
En algún momento de la siguiente hora me quedé dormido, pensando que este torneo era el primer paso para lograr mi cometido.

Entreabrí los ojos sintiendo peso sobre mí, distinguí la forma de una persona y dejé escapar un bostezo, si planeaban asesinarme yo era la víctima más despreocupada del planeta.
La persona estaba sentada sobre mí y apoyó sus manos en mi pecho, un toque suave, y entonces mis ojos se ajustaron a la oscuridad y la poca luz de la luna que se escabullía entre las ventanas. Mirajane estaba sentada a horcajadas sobre mí, observándome con sus ojos azul marino, su pelo estaba suelto, y su cerquillo caía sobre su frente a diferencia de siempre que lo llevaba atado hacia arriba.
-¿Estás despierto?- Preguntó.
Balbuceé un sí con voz ronca y aclaré mi garganta.
-¿Qué- Salió otro bostezo.- Estás haciendo?- Le pregunté.
-Estoy interesada en ti.- Su mano se deslizó lentamente hacia el final de mi abdomen y me apoyé sobre mis codos, acercándome a ella.

El Último Semidiós: Wrath of Scars. (NarutoxFairyTail)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora