no goodbyes [sevenkayne]

n u e v e

—¿Qué mierda haces acá? —dije enojada.

—Vine a hablar, Zoe —contestó Tomás, tranquilo, como si no se hubiera cagado en mi.

Quise cerrarle la puerta en la cara pero apoyó sus manos en la misma y claramente él tiene más fuerza. La solté y me crucé de brazos, no iba a pasar a mi casa.

—No tengo nada para hablar con vos, andate.

—Dejame aclararte las cosas, por favor —suplicó triste.

—¡Tomatela flaco! —exclamé al borde del llanto.

—No me voy a ir una mierda Zoe, escuchame.

—¡No, flaco no! —grité rompiendo en llanto—. ¡No quiero sabe más nada con vos, andate!

Tomás iba a responder pero se quedó callado mirando a alguien atrás mío, me di vuelta y Seven miraba la escena enojado. Mi ex novio miró al rubio con mucho odio, como si estuviera conteniendo las ganas de cagarlo a piñas.

—¿Ahora te coges raperos? —preguntó en un tono de soberbia.

Iba a responder pero Seven se me adelantó.

—Flaco, te dijo que te vayas —caminó a la puerta y se paró detrás de mi—, así que tomatela ahora si no querés tener problemas.

Tomás lo miraba con una cara de ojete impresionante, apretó sus puños y actué antes de que la puerta de mi departamento se manche en sangre.

—Andate, posta te lo digo —le dije más tranquila—. Mañana te llamo.

No quería decir lo último para que Seven no flashe, pero era la única forma de que se vaya.

—Te cruzo de nuevo y te rompo todo rubio de mierda —amenazó Tomás mirando a Joaquín con odio, luego de eso se fue.

—¡Te espero, imbécil! —contestó el amenazado.

Cerré la puerta y deslicé mi espalda por la misma, hasta caer sentada en el piso. Escondí mi cara entre las manos y empecé a llorar, Seven me miraba cruzado de brazos, estaba enojado y yo lo sabía.

—Si seguís teniendo mambos con tu ex no sé si voy a querer seguir con esto —soltó con un tono frío.

Lo miré triste y él se agachó para quedar a mi altura, limpió una de mis lágrimas y negó con la cabeza.

—N-no, Joaco yo... —la angustia no me dejaba hablar—... No me importa Tomás, me importas vos ahora —confesé.

—A mi también me importas, y me chupa un huevo que te haya conocido hace dos días —susurró tomándome una mano—, pero ya conozco esta historia Zoe. El ex siempre gana.

Me quedé en silencio y Seven me besó. Agradecí eso, no tenía ganas de hablar, ya no.

—No te vayas —pedí cortando nuestro chape. Él negó—. Quedate conmigo esta noche, por favor.

Se puso de pie y me extendió su mano, la cual tomé con gusto. Puso un mechón de pelo detrás de mi oreja y me besó nuevamente, acorralándome en la puerta. Subí mis piernas a sus caderas y él apretó mi culo, caminó hasta mi habitación y me tiró en la cama.

Hasta que eso se convirtió en rutina, sólo coger. Un mes entero cogiendo, sólo cogiendo. Sin sentimientos, sin compromisos. Así nos mantuvimos un largo tiempo.

Yo te creí cuando me dijiste que te importaba.

otro capítulo kk peeeero EN EL SIGUIENTE EMPIEZA LO PICANTOVICH.

la pregunta es: ¿están preparadas para sufrir? 😈😈😈😈😈 la q llora pierde perritas.

guille💖