JiCheol ♡ Amorterapia.

Capítulo 3

Pasó más de media hora y JiHoon no se movió de su lugar, tenía la mirada fija en las cosas que había dejado su supervisor sobre la mesa pero estaba más que seguro de que no tomaría ninguna de ellas.

Había escuchado sobre la risaterapia y no le encontró sentido alguno, existían payasos que visitaban a los niños pero él estaba a punto de ser un médico, no estudió para ser la vergüenza de la familia colocándose un disfraz ridículo el cual solo mancharía el respeto de su bata blanca.

—¿Estás listo? —Preguntó SeungCheol golpeando la puerta, al no escuchar respuesta decidió entrar.

Sabía lo difícil que sería esto cuando su antiguo profesor le planteó el caso de JiHoon, un chico apático y muy serio, alguien excepcional en los exámenes pero muy pobre en la parte humana.

Si planeaba quedar trabajando allí estaba seguro de que no lo aceptarían.

Para trabajar con niños con cáncer debías hacer los procedimientos, exámenes, preguntas, incluso su estadía hospitalaria lo más agradable posible.

SeungCheol tomó un corbatín rojo, unos lentes enormes junto a tres pelotas de plástico y se acercó al menor. Iba a colocarle los lentes cuando JiHoon le bajó la mano alejándose de él.

—Yo no soy un payaso —Dijo JiHoon con su rostro serio mirando lo ridículo que se veía SeungCheol con una peluca amarilla y flores pegadas en su bata.

—Sé que no lo eres pero es parte de nuestro servicio para no aburrir a los pequeños y que sientan lo menos posible que están en un hospital —JiHoon arqueó una ceja —A muchos les ayuda con el miedo cuando recién ingresan.

—Deben saber que están en un hospital —JiHoon frunció el ceño —Deben saber lo que les pasa para tener ánimo de recuperarse.

—Créeme que lo saben —Exclamó SeungCheol elevando la voz —Cada niño que está afuera sabe que puede morir en cualquier momento, no es necesario recordárselo todos los días. Ahora por favor vístete y sale.

—No, no lo haré.

SeungCheol sacó la carpeta de evaluación de JiHoon y comenzó a escribir rápidamente en ella para luego entregársela al pequeño —Estás reprobado.

—¿Qué? —Apretó sus puños y tomó la carpeta abriéndola para revisar el puntaje, un cero hizo que sus ojos se abrieran como platos —¿Me reprueba por no vestirme de payaso y seguir su estúpida idea?

—No, te repruebo por no saber adaptarte al servicio, por no acatar órdenes aún cuando sigues siendo un estudiante y por faltarme el respeto ahora —Tomó una nariz de payaso de la mesa y apuntó la puerta —Puedes irte a casa.

El cuerpo de JiHoon se congeló por completo, no podía reprobar su internado en el primer día. Sus padres lo matarían y sería la vergüenza de su generación.

Pero tampoco daría su brazo a torcer.

Tenía la esperanza de que su profesor lo cambiara de servicio así que se dio la media vuelta y se fue del hospital.

—Niño tonto —Murmuró SeungCheol negando con la cabeza —Tan lindo y amargado, estoy seguro de que se ve tierno si sonríe.