JiCheol ♡ Amorterapia.

Capítulo 11

Golpeó dos veces la puerta y entró sin esperar alguna respuesta.

—Te dije que no me molestaras, JiHoon —Dijo SeungCheol sentado en un sofá.

El castaño cerró la puerta y el mayor se levantó.

—¿Qué parte no has entendido de qué ahora no me molestes?

—¿Y así se la da de excelente médico? —JiHoon se cruzó de brazos mirándolo a los ojos —Amable con todo el mundo y simulando ser perfecto.

—¿Disculpa?

—Es un mal educado y estaba seguro de que todo el tiempo fingía —Lo acusó JiHoon —Pero se le cayó la máscara.

—¿Yo soy el que finge? Te recuerdo que te tuve que sacar una sonrisa con amenazas —Caminó hacia el pequeño manteniendo el rostro serio —Y sé que en realidad eres mucho más dulce y agradable de lo que le haces ver a los demás.

JiHoon no despegó la mirada de su supervisor, no lo intimidaría solo por ser mayor o por ser un médico egresado.

—Usted no sabe nada de mí, así que no hable solo por hacerlo.

—¿Te duele, JiHoon? La verdad te pega en tu punto débil ¿No es así? O me dirás que lo que dicen tus profesores de ti es cierto.

—No sé de qué está hablando.

—No creo que nunca lo hayas escuchado, un robot sin sentimientos, un amargado, muy excelente para las calificaciones pero pobre en la calidad humana.

—Pueden pensar lo que se les dé la gana, al igual que usted.

—Dudo que te de lo mismo lo que piense yo de ti —Dio un paso hacia el pequeño y JiHoon lo retrocedió —Estás bastante nervioso ahora, pareces un gatito asustado.

JiHoon levantó su mano sin medir las consecuencias y SeungCheol lo cogió de la muñeca antes de que el golpe llegara a su mejilla.

—Estás arriesgando mucho con tu actitud —Sujetó la muñeca por encima del menor.

—Podría acusarlo por acoso, además busca cualquier momento para denigrarme como estudiante y no estoy dispuesto a dejarlo pasar.

—¿Acoso? —Sonrió divertido.

—No crea que no me he fijado, me preguntó sobre si tengo novio y siento que me mira más allá que como un simple supervisor.

—No te creas tan irresistible, podría fijarme en chicos más lindos y agraciados que tú.

JiHoon apretó sus puños e inclinó levemente su cuerpo hacia adelante —¿Entonces por qué no lo hace?

—Porque el que me gusta eres tú —Confesó SeungCheol soltando la muñeca del pequeño para sujetarlo de la nuca, lo acercó bruscamente a él pero no alcanzaron a tocarse los labios, ni siquiera a rozarlos.

La confusión que tenía JiHoon en ese momento era enorme, por una parte quería empujarlo, salir de allí y demandarlo.

Pero otro lado se sentía bien.

No podía evitar la atracción que sentía hacia SeungCheol teniéndolo tan cerca.

—¿Por qué demonios me gustas? —Cuestionó SeungCheol mirando los labios ajenos, delgados y rosados.

—Lo mismo digo —Susurró JiHoon.

De pronto tocaron la puerta y SeungCheol soltó a JiHoon para sentarse en el escritorio.

El castaño ni siquiera se dio cuenta cuando se alejó. Vio al director del hospital entrar, lo saludó para luego pedir permiso y salir de allí.

Caminó hacia el balcón del servicio para tomar aire y repetirse mil veces que lo que había ocurrido segundos atrás no podía volver a pasar.