Nivel de Maldad [Lilo y Stitch]

💙7💙

~"Ella es rara"~

Nunca habia pensado en una chica como una posible amenza a mi integridad. La mayoria solo se limitaba a babear mientras yo estaba serca, en las fiestas tenia para elegir y podía llevarme a la cama a cualquier mujer que quisiera. Solo les mostrabas un poco de lujo y ya las tenías de piernas abiertas en alguna cama.
Era asi de sencillo, no había chica que no me dijera que no, en general caian rendidas con apenas verme salir de mi ferrari. Mirandome con interes, pero para desgracia de ellas a penas conseguía lo que mi masculinidad deceaba, me iba sin la promesa de volverles a llamar. Arrojando a la basura cualquier papel con numero telefonico.

Por lo que cuando una enana de cabello negro y actitud borde y desafiante se subió al ferrari dandole una mirada de desagrado a mi auto.

Empezé a cuestionar su orientación sexual.

Osea. Es un ferrari y lo miraba como si fuese solo un rastrojo con ruedas o algo peor. Su mirada oscura tras esos lentes solo mostraba molestía.
Parecía que quería salir corriendo de allí o mucho peor, destruír el coche.

Estaba algo desconcertado.

La apuesta de Felix aun resonaba en mi cabeza.

"Si logras llevarte a la cama a la Monja te doy mi parte de el dinero que ganamos ayer en las carreras"

Pensé que quizá su estilo no eran los autos, y que caería muerta al ver la mansión.

Pero al aparcar frenté a la casa su gesto se mantuvo serio y su mirada se paseaba frustrada por el lujoso diseño de mi casa.

Y peor aun. Ni una pizca de asombro al ver el interior, el unico cambio que pude apreciar en su semblante fue de fastidio a incomodidad.

Vaya que si era rara.

Entramos en mi habitación y deje las cosas sobre la cama.

--Bueno, no entiendo el tema que estamos viendo ahora, creo que con eso podriamos empezar-- Habló Lilo acomodandose sus gafas y mirandome con gesto serio y demandante.

--Wou wou, ¿Tranquila si?-- Pedi risueño ante su apuro. Ganandome una levantada de cejas de parte de Lilo-- ¿No quieres tomar o comer algo antes?-- Pregunte acercandome sigilosamente.

Ella suspiró frustrada.

Lo cual me confundió.

--Vine para que me ayudes a comprender Física, no a merendar contigo como si fuesemos amigos-- Aclaró ella tajante mientras sacaba su cuaderno de adentro de su mochila blanca con puntos negros.

--Y bueno. Dime que no entiendes-- Dije rindiendome. Era toda una Monja.

Lilo comenzo a explicarme.

Y llegué a la conclucion de que, lo que para mi eran formulas físicas, para ella eran formas de geroglificos arcaícos.
Era un cero a la izquierda. Rezé por haber heredado la pasciencia de Jumba para explicar, y me dispuse a iniciar mis clases de tutoría para una Nerd no tan sabelotodo.

Su ceño estaba fruncido y de vez en cuando tambien fruncía la nariz mientras se carcomia las uñas, sus ojos cafés divagaban entre los ejercicios que le copié en una hoja.