Nivel de Maldad [Lilo y Stitch]

💙21💙

"Rescate"

Narra Angel.

Estupido Seth... Solo a el se le ocurre ir solo al barrio en el cual es jefe el primer sujeto que lo quiere muerto.

Y si. Yo se todo lo que mi primo hizo y hace, se como es la movida de estos idiotas... Porque fui parte de ello. Ayude a Seth en varias de sus locuras, era divertido. Hasta que empezaron a ser demasiado arriesgadas. Y no fue hasta que resulte herida, que no decidi parar.

Quize convencer a mi primo de dejarlo. Pero el idiota fue influenciado por sus amigos a seguir en estas jugadas. Temo lo peor.

Debo ir preparada para precenciar lo peor. De lo contrario va a irme mal.

--Señorita, ya estamos por llegar-- Asciento y cargo mi arma. Mi padre me enseño a disparar a los doce, argumentando que a una princesa la iban a querer atrapar varios bandidos.
No se me da mal, de hecho tengo buena punteria. Pero a Seth nadie lo supera.

Bajamos del auto y nos subimos a la azotea de un viejo edicio por la escalera de emergencia.
Solo dos azoteas y estariamos arriba de la posada donde Hams tortura a todos sus enemigos.
Tome impulso y salte al igual que los demas guardaespaldas. Salte una vez mas. La azotea estaba vacia.

Habia una puerta que daba a unas escaleras. Descendimos, siempre alertas. Los.hombres de Hams a veces pueden ser despiadados.

--Por aqui-- susurre escabullendome por el conducto de ventilacion algo angosto. Conocia esta vieja posada como la palma de mi mano. Siempre veniamos a buscar a alguno de los torpes amigos de mi primo. Pero juntos... Ahora sinceramente temo por la vida de Seth. El solo no podria con todos los idiotas que aqui estan.

Segui gateando por el ducto estrecho y nauseabundo. Hasta llegar a una especie de camara lo suficientemente espaciosa como para que todos pudieranos mirar por las rejillas de ventilacion que daban a una habitacion roja con detalles en madera.

--Pensaste... ¿Que podias entrar y burlarte de mi como siempre lo haces?-- Pregunto una voz que reconocí perfectamente. La de Hams.
Solo traia a dos de sus hombres.

Frente a el... En una silla atado por las manos y los pies con cintos. Su cara... Cardenales nuevos se formaban en su ojo derecho, hilos de sangre se escurrian de su boca y cabeza.

Habia encontrado a mi primo.

--Por fin sé quien eres. Pequeña rata insignificante-- Dijo Hams con una rabia y crueldad en sus ojos que hizo que mi piel se erizara-- Seth... Williams.

Un puño se estrelló con fuerza en la mandibula de mi primo, y el solo jadeo de dolor.

--En marcha-- Gruñí.

Mis hombres se encargaron de disparar a los dos matones que acompañaban al dientudo. Patee la rejilla y cai de pie en el suelo corriendo hacia mi primo. Los guardespaldas sostuvieron a Hams por los brazos y otros trabaron la puerta.

--Vaya... Pero si han venido a rescatar a la princesa-- Dijo Hams divertido.

--Te ves demasiado alegre para alguien a quien van a apuntarle los dedos de la mano y de los pies-- Siseé con rabia. Seth estaba inconciente. Y estaba perdiendo mucha sangre, un corte profundo surcaba una parte insignificante de su frente, y el resto se perdia en su cabellera enegrecida por la sangre.