18. Cambio

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Maratón 3/3

Cómo todo cambió

Laura

— Tienes que venir esta noche. — me dice Lily mientras esperamos nuestro pedido.

— ¿Y ver a Ross? — pregunto. — Paso.

— ¡Oh, vamos! Será divertido. Te has ganado el amor del jefe, y quiere hacerte una despedida. Tienes que venir.  Todos te extrañaremos...

Suelto un suspiro y asiento. — Bien. Vendré, pero con Erik.

— De acuerdo. De todas formas, ese hombre me cae bien. Joder... Es realmente apuesto. ¿Por qué no le das una oportunidad?

— Porque es mi amigo y no estoy interesada en él de esa manera. Además, no ha pasado mucho tiempo desde que Ross y yo hemos terminado.

Además, a Erik le atraía Ally. En realidad, esa era la razón por la que lo traería conmigo esta noche.

— Qué desperdicio de hombre... — murmura mientras suelta un bufido.

Suelto una carcajada. — Dudo que a Rocky le agrade ese comentario.

— ¿Lo ves por aquí? Porque yo no.

Ruedo los ojos y río levemente, pero entonces la mesera nos trae el pedido. Lily me mira nerviosa y yo fulmino con la mirada a Julianne.

— Aquí están las hamburguesas y papas fritas que han pedido. — dice evitando mirarme.

— Bien. Puedes marcharte. — respondo. — Estoy segura de que estás ansiosa por llegar a la cama de Ross.

— Ya tuve suficiente mientras que salía contigo. En realidad, era más divertido cuando te decía esas cosas tiernas que me contabas y luego se reunía conmigo.

La mataré. Lily al parecer lee mi mente ya que le dirige una sonrisa tensa a Julianne, y le habla.

— Creo que ya puedes irte, Julianne...

Ella me regala una sonrisa de suficencia y se marcha a la cocina. Estoy a punto de comer mi hamburguesa pero la mano de Lily me detiene.

— Seguramente la escupió. Yo que tú no como eso. — me aconseja.

Suelto un bufido y dejo mi comida en el plato. Lily y yo ya no trabajábamos aquí pero de todas formas seguíamos viniendo a comer ya que en sus tiempos libres, Silvia y Ally se sentaban con nosotras y hablabámos.

— Debo irme... — murmuro para después levantarme.

— ¿Tan pronto? ¿Vendrás esta noche?

— Si. Nos vemos en la noche. — me despido.

Lily me dirige una sonrisa cálida y yo se la correspondo antes de marcharme de allí. Suelto un suspiro y me apoyo contra la pared. No soportaba ver a Julianne sabiendo que estuvo con Ross.

Decido largarme de allí de una vez por todas y comienzo a caminar en dirección al cementerio, para visitar a mi abuelo como hacía todos los días. Cuando llego, me dirijo a su lápida y me siento allí tras depositar unas flores en ella.

— Mañana me marcharé a Londres... Sé lo mucho que odias su acento, me lo has dicho cuando llegué. Decías que yo tenía ese maldito acento. — recuerdo sonriendo. — Extrañaré a Tessa, no voy a mentir... Pero necesito alejarme de aquí, este no es mi hogar. Aunque no venga a verte, Mark y Stormie me han prometido venir y traerte flores todas las semanas. Te extraño, creí estar preparada para tu partida pero me he dado cuenta que no. Siento si alguna vez te he hecho falta, si me recordaste y yo no estaba allí, realmente lo siento... Te quiero, abuelo, y sea donde sea que estés... Siempre te llevaré en mi corazón.

SeductionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora