Estuve pensado en más de una oportunidad en los caminos, es claro denotar que siempre cuando escribo es mi conciencia quien me atormenta, constantemente por pequeñas razones me dejo llevar por el dolor, y es tan difícil olvidarlo, quizás la contradicción exista en mi forma de intentar ver lo que me rodea, son tantas las palabras y los sentimientos que es difícil acomodarlos en el orden de la coherencia, he vivido lo suficiente para clasificar el dolor, la tristeza y el placer, tan separadas pero arraigadas a la misma intensidad, he vivido lo suficiente para entender que he lamentado cosas que ahora solo guardo en recuerdos, en estimaciones que en algún momento tuvieron su importancia.
Cada día se vive emociones distintas, pero aún no dejo la costumbre de llorar antes de la ducha, es por eso que mi tiempo en el baño suele ser extenso, aveces no requería ducharme, aveces mis necesidades nunca existieron, porque en esas ocasiones necesitaba llorar, necesitaba sentirme yo misma, el toque de la soledad y privacidad me ayudan siempre ha pensar en todo un poco. aún no entiendo por que cuando lloras, no lo haces por un solo motivo, lo haces por todo y a su vez por nada, porque asimilando la causa encuentras mas motivos para ser desahogados, nunca me preguntes ¿por qué anduve llorando?, porque te aseguro que aveces ni yo se porque lo hago, simplemente es la necesidad de derramar el alma.
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Siempre marciano
RandomEste libro habla desde la perspectiva de un ser que ve el mundo totalmente distinto a como lo vemos, más allá de una imaginación que navega, se encuentra el escritor, describiendo lo que le rodea en su cabeza de marciano.
