Aitor (Furry/Yaoi)

5. Lo Siento.

Narra Aitor.

Los siguientes días pasaron con suma normalidad al menos, seguía hablando mucho por chat con Ángel y para mi mala suerte no le veía cambio alguno a Aarón, era casi como si él me ignorara completamente, como si no existiera para él, fue por eso estaba decidido, el día de mañana terminaría con él, aún me dolía el pensar que se había vuelto así por un capricho y más aún en sus palabras.

Era domingo, estaba a un día de cortar con Aarón, usualmente este día no salía de casa, la explicación; vivo solo y no me gustan los lugares concurridos. Parecía ser un día normal, que aproveché para lavar ropa, hacer tareas y sobre todo en pensar que le diría mañana a Aarón, tenía que ser franco con mi decisión de terminar todo. Aproveché  la noche y me dispuse a leer uno de los libros que compre en mi salida con el toro y caí dormido.

Debido a mi ansiedad dejé que los días de la semana pasaran, y nomás no me atrevía a hablar con Aarón, muy en el fondo no quería hacerlo, pero tenia que hacerlo tarde o temprano, sentía que seguía unido a él a pesar de ya no hablar. Él, por su parte seguía aguantando los celos de verme con otras fursonas, me daba gusto saber que al menos él tampoco se la estaba pasando bien.

Finalmente me había decidido, hablaría con él el viernes, mi plan era hablar con Aarón antes de que él se fuera, saldría unos minutos antes al baño para topármelo casualmente cuando él saliera. No sabía que pasaría después, pero estaba seguro de que no quería seguir con él después de todo.

Ese día pedí permiso para salir al baño y me dirigí a mojarme un poco la cara en los lavabos, quería calmar un poco mis nervios y aclarar mis ideas. Estuve pensando un momento, entonces abrí los ojos y vi que se había otra figura junto a mí en el espejo, era él.

—Aarón... ¿A qué hora entraste? —pregunté sorprendido.
—Acabo de llegar —respondió serio.
—Ya... Necesito que hablemos de algo, ahora que por fin te dignas a hablarme —comenté cortante.
—¿Y qué es ese algo? —preguntó al parecer molesto por mi comentario.
—Yo quiero que.... No, mejor dicho, terminamos —contesté y lo miré severamente tratando de controlar un poco los nervios.
—¿Eh?, ¿Aún éramos algo?, Pensé que después de lo que le hiciste a mi carro ya no éramos nada —comentó.

«¿Eh?»

Me quedé un momento en silencio, articulando cuánto él había dicho.

—Si... Aún éramos novios, tu actuaste muy arrogante esa vez y eso hizo que me enojara —dije molesto.
—Tu siempre te quejas Aitor, de todo, y tus quejas arruinaron la puerta de mi auto —dijo.
—¿¡O sea qué te importa más tu estúpido carro, qué nuestra relación!?, ¿¡Qué carajos te pasa Aarón!? —le grité furioso.
—¡Cállate, no metas a mi auto en esto! —me gritó también enojado.
—¿Estas bromeando verdad?, ¿¡Cómo puedes tenerle más amor a algo material que a mi!? —pregunté aún más enojado.
—Si, a eso que tu llamas cosa material la quiero más de lo que a ti —respondió matándome.

«'Cause you're just a man It's just what you do»

Sentí un fuerte dolor en el pecho seguido de una punzada de rabia en mi estomago, había llegado demasiado lejos, quería llorar pero no podía, él no se merecía mis lágrimas, me tragué mi orgullo y cubierto en ira le lancé uno de mis puños a su cara golpeándolo. Aarón era un estúpido.

Después del golpe el oso quedó algo aturdido, aún tenía que ir por mis cosas al salón y largarme de ahí, no quería estar ahí, ni mucho menos seguir viéndolo.

—Espero y nunca te arrepientas, estúpido —dije y salí de ahí.

Para mí suerte la clase ya había acabado, solo entré al salón y recogí mis cosas, para inmediatamente irme de aquel lugar, muchos de mis demás compañeros al ver tal acto me miraban extrañados y antes de que comenzarán las preguntas, me fui de ahí.